Ángel de la Guarda

Capitulo 37

-¿Por qué te molestas Stiles?– le pregunto Derek

- No puedo entender el porque apoyas a mi prima en esto – dijo enfadado el castaño, venían discutiendo desde la cena

- Ponte en su lugar, ¿me marcarias sabiendo que si tu mueres, yo muero o al revés? – pregunto tratando de hacerlo entrar en razón metiéndose en la cama

- No – dijo en un cantito y un puchero acostándose a su lado – pero buscaría la forma

- no la hay, ¿no crees que si existiera Odi o Lucifer ya nos la hubieran dicho?

- pero, yo moriría contigo – dijo serio

- Amor, en esto estoy con Odi, no voy a marcarte, se que tu puedas salir libre de esta guerra, pero la manada es muy incierta, no voy arriesgar tu vida, no voy a esperar a que me maten y tu conmigo, cuando puedes salir victorioso y tener una vida propia al no estar marcado

- ¿y si es al revés? – el lobo lo miro confundido – ¿si yo muero y tu vives?

- Te prometo tratar de seguir mi vida pero siempre te esperare en esta vida u en otra – dijo Derek mirando los ojos húmedos del castaño – Te amo Stiles y nadie va hacerte dejar de sentir lo que siento

- Es la primera vez que te veo hablar demasiado cursi – dijo emocionado haciendo poner los ojos en blancos al lobo – Te amo sourwolf, no lo olvides

Se durmieron después de haber hablado, el lobo estaba exhausto para hacerlo suyo, se despertaron a las 5 de la mañana, se pusieron las pesas de vuelta y empezaron a entrenar, esta vez además de correr hicieron lucha cuerpo a cuerpo y nadaron en un lago cerca de la mansión, algunos casi se ahogaron por las pesas, los que se salvaban eran los humanos que entrenaban igual pero a veces los mandaban a leer sobre curaciones y practicar sobre los de la manada, mientras veían como peleaban los ángeles y demonios, Stiles ya superaba a Eros, le faltaba superar Blaise y después a su prima, la cual a veces se iba sola a entrenar a otro lado sin avisarle a nadie.

-Odi ¿Dónde has ido estos días a entrenar? - Pregunto Stiles con toda la manda mirandolos

- eh ido con algunos demonios a entrenar, Blaise y Eros han estado conmigo – respondió lo ultimo mirando a sus dos lobos

- ¿y por que no nos llevas? – pregunto Jackson

- todavía no pelean bien – respondió

- Vamos, se tienen que acostumbrar a pelear con seres mayores a ellos – animo Eros

- Bien cámbiense y vamos – dijo para después encaminarse a la mansión, en una hora ya estaban todos listos – Mason, Mellisa, Ally, Tio, ustedes se quedan estudiando

- Pero nosotros queremos ver – se quejo Mason

- Vayan nosotros nos quedamos – hablo Mellisa

- Bien vamos, no se separen hasta que lleguemos al lugar, Eros al frente Blaise, Stiles a los costados, yo voy atrás

Cruzaron una puerta que daba hacia atrás de la casa, era el mismo camino pero al dar 15 pasos se empezaba a ver rocas blancas y mucho frio y todo desolado, era como ver un acantilado el abismo mismo y como empezaba la tierra misma, pasaron dos minutos y ya estaban casi congelados, caminaron 15 minutos mas y ya empezaba hacer calor, nadie se separo al ver que empezaba un lugar árido y de un color de un atardecer anaranjado, se asustaron varias veces por que en el camino se escuchaban gritos y llantos, suplicas en momentos habían visto sangre fresca y huesos de humanos, dejaron de caminar llegaron a otra mansión a media terminar, clásica que daba miedo, al entrar observaron que era como un gimnasio pero llenos de armas y lujos, eran más de 300 demonios que estaban agrupados trabajando en algún entrenamiento

-Este obviamente es mi equipo, son de los buenos no se preocupen, pelearan con nosotros – aviso Odisea

- ¿Los malos pelearan en contra? – pregunto Liam