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Los días habían pasado volando, ya era viernes y estaba empacando la ropa que iba a llevar para Los Ángeles. Emma, Zaid y yos nos mandamos a hacer unas camisetas con la cara de Katy Perry, siempre hacíamos lo mismo cuando íbamos a algún concierto. Decidimos viajar hoy viernes porque el viaje es un poco largo y no queríamos llegar tarde mañana sábado.

Zaid pasó por mi a las 3:00 p.m.

Escucho el pito del carro de Zaid y salgo corriendo de la cocina con la mitad del sándwich en la mano.

- Chao mamá.

- Chao Max, me llamas apenes lleguen y ya sabes nada de hablar ni recibir nada de extraños.

- Si mamá ya sé -le digo poniendo los ojos en blanco.

En todo el camino hablamos. Emma y yo nos dormimos mientras llegábamos y así descansar un poco.

El viaje estuvo tranquilo y sin tanto tráfico lo que nos ayudó a llegar antes de la hora planeada.

Antes de llegar a la casa del papá de Emma fuimos a la tienda de antigüedades que había dicho la mamá de Emma para ver si había una taza como la que rompí. Entramos a la tienda y de tanto buscar corrimos con surte de hallar la taza, costaba 10 dólares parecía un poco cara, pero debía aprovechar porque esa clase de tazas hace rato que no se venden y si mi madre descubría que la rompí me mataría.

Habíamos pasado toda la tarde buscando la taza en esa tienda, al salir nos dirigimos a la antigua casa de Emma, al llegar su padre nos recibió feliz, nos mostró donde dormiríamos, los tres íbamos a dormir en una habitación cada uno en una cama. Arreglamos nuestras cosas y bajamos a ayudar a preparar la cena, después de cenar subimos a la habitación.

Nos bañamos a la velocidad de la luz porque se nos estaba haciendo tarde.

Emma y yo decidimos ponernos un short con la camiseta, ella con unos zapatos y yo con unas botas negras de tacón grueso y Zaid se puso la camiseta con unos vaqueros. Emma y yo no decidimos maquillarnos, solo nos aplicamos labial.

Eran las 7:30 cuando bajamos de la habitación, el concierto empezaría a la 8:40 pero decidimos irnos temprano para ponerlos adelante en las primeras filas, el papá de Emma se ofreció a llevarnos. Antes de salir le pedimos el favor al papá de Emma que nos tomara varias fotos para presumir de nuestro concierto después de tomar mil fotos decidimos irnos.

Al llegar al lugar del concierto había una fila enormemente larga que parecía que no acabaría. Zaid se acercó a la fila para averiguar si esa era la que debíamos hacer para entrar, pero gracias a Dios era la fila de comprar boletas así que entramos por una puerta que estaba a la derecha y esa puerta daba a la primera fila, decidimos ponernos en los primeros puestos.

Ya faltaban 5 minutos para que empezara el concierto, empezaron a salir fuegos artificiales anunciando que ya iba a salir Katy. Al salir empezó a cantar a Dark Horse, todo parecía un sueño era tan increíble cada momento. El concierto finalizó a la 1:00 y cerró con California Gurls.

Antes de que todas las personas salieran Emma le envió un mensaje a su papá para que pasara por nosotros. Al salir nos compramos unos batidos de arequipe con galletas para comer cuando llegáramos a la casa.

- ¿Cómo estuvo el concierto chicos? -pregunta el papá de Emma.

- Espectacular -dijimos los tres al mismo tiempo con risa.

- Señor John nosotros le compramos un batido de arequipe -le dice Zaid.

- ¡Gracias chicos! -nos dice con una gran sonrisa.

Llegamos a la casa y Emma abrió la puerta. Entramos y nos sentamos en el sofá de la sala para descansar un rato mientras el papá de Emma guardaba el carro en el garaje, le entregamos el batido al papá de Emma y con los chicos decidimos subir a la habitación para tomar el de nosotros allá. Decidimos sentarnos en el piso y cada uno entraba en las redes sociales publicando las fotos del concierto, nos acostamos en la cama y sin darnos cuenta en minutos ya nos habíamos dormido.

Nos despertamos a las 10:50 a.m. y bajamos a desayunar algo ligero.

Subimos a bañarnos para irnos a casa.

Cuando llegué mi madre no estaba en casa y me había dejado una nota en la puerta de la nevera diciendo que estaba con su mejor amiga de compras, aproveché que ella no estaba y puse la taza nueva en su lugar.

- No creo que se haya dado cuenta porque no me dijo nada -me dije mientras ponía en su lugar la taza.

El resto del día pasó volando y con ello vino el martes por la mañana.

Termino de arreglarme y bajo por un vaso de leche. Mi madre estaba comiendo tostadas con café y en la taza nueva yo deseaba que no se diera cuenta que era nueva.

- Max tienes algo que contarme -dice mi madre alzando las cejas.

- ¿Por qué mamá?

- Ya sé lo de la taza Max

- ¿Cómo lo supiste mamá?

- Estaba buscando en tu closet unas medias y la encontré envuelta con papel.

- Te juro que fue un accidente mamá y la escondí ahí porque nunca abres mi closet.

- Me hubieras comentado yo iba a entender.

- Es que yo sé lo valioso que eso es para ti y estaba esperando encontrar una nueva para decírtelo. Disculpa mamá.

- Tranquila un accidente le pasa a cualquiera cariño, no te hubieras preocupado por comprar una nueva, pero esas tazas son antiguas cómo diste con esa.

- En una tienda de antigüedades en California, la mamá de Emma me ayudó a encontrarlas.

Llegamos al instituto y entramos al laboratorio ya que teníamos clase de química.

Al salir de clases Zaid, Emma y yo nos fuimos a la heladería, Gael nos dio el trabajo porque el papá estaba enfermo y él tenía muchos entrenamientos por el campeonato que venía. Trabajábamos todas las tardes de lunes a viernes, Gael llegaba siempre a las 6:00 p.m. para cerrar. No era un trabajo que daba mucho dinero, pero era algo divertido, nos mandamos a hacer unos uniformes para no atender con el uniforme del instituto.

La tarde había pasado rápido, las ventas estuvieron de locura llegaron demasiadas personas a la heladería desde que empezábamos a trabajar no se había llenado quizás porque nosotros nos encargamos de darle más vida al lugar. Emma y yo compramos unas flores artificiales y las pusimos en todas las mesas como decoración, pusimos un toca discos el cual los clientes se encargaban de elegir que canción podían escuchar y para los niños colocamos unas piscinas de bolas de colores. Todo era hermoso, a Gael y a su familia le gustó como habíamos dejado todo, están agradecimos porque gracias a nosotros llegaban más personas y pasaba lleno.

Acabó nuestro día de trabajo y regresamos a casa. Zaid y yo nos fuimos en su carro mientras que Emma se fue caminando porque su casa queda a dos casas de la heladería y la de nosotros queda un poco más lejos y no era en la misma dirección que la de ella.


¿Quién de ustedes les gusta tanto Katy Perry como a mí?

Espero que les haya gustado este bello capítulo..

Mi único y verdadero amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora