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Blue & Grey


KookTae


Vamos, puedes correr un poco más.

Jeon Jungkook es un gran estafador, lo que el quería lo tenía y sin gastar un solo peso, tenía amigos por todo el mundo y esos amigos le facilitaban muchas cosas.

Tan gris.

Vamos que Jeon no era tan malo, simplemente buscaba lo que nadie podría darle, mataba a personas inocentes si así debería ser para obtener lo que quisiese. Jungkook tenía todo en la palma de su mano con tan solo un chasquido de sus blancos dedos.

Jeon Jungkook podía tener todo exepto algo o más bien a alguien...

Kim Taehyung era el hijo de un gran CEO de Corea y próximo heredero de la fortuna Kim, siempre estaba lleno de gente a su alrededor. Hombres con grandes armas lo protegían, podían saber que incluso gente que estaba metida en el narcotráfico cuidaban de él, prácticamente Kim Taehyung era intocable

Pero Kim Taehyung era tan azul...

Estamos aquí junto a Jeon que corre tras los frondosos árboles llenos de nieve y las calles repleta de esta también. Navidad era una festividad demasiado bonita pero no lo era tanto si la pasabas solo, por ello Jeon quería a toda costa tener entre sus brazos a su amado, quería y soñaba tenerlo para el tan solo una noche, así nos encontramos en la densa noche, Jungkook corría por las calles en busca de distraer a algunos guardias para que sus hombres entrarán a la mansión y pudieran sacar a su príncipe.

Sus piernas dolían y se sentían entumecidas pero seguía corriendo, encontró un hueco entre los árboles y se escondió dentro, el espacio era poco pero lo ayudo a escabullirse de los grandes hombres que iban tras el.

Unos minutos después salió y corrió de vuelta a la entrada y ahí encontró al único dueño de su corazón.

- Jungkook ¿Te das cuenta en lo que te estás metiendo al llevarme así?- oh, nos saltamos un tema importante y ese es que Jeon y Kim se conocían más que bien, fueron amigos en sus años de estudio, mejores amigos podríamos decir pero sucedieron cosas y cada uno tomo diferentes caminos, Taehyung se volvió popular y dueño de una fortuna y Jungkook perdió a sus padres y no supo que hacer con esa fortuna, simplemente la dejo guardada y empezó a hacer cosas que un adolescente no debería hacer, se convirtió en la amistad que nadie quería cerca de sus hijos

El señor Kim no lo quería cerca de su heredero, diciendo que era una mala influencia.

- Hey, sean cuidadosos si no quieren que sus cabezas vuelen, vamos que no tenemos todo el tiempo del mundo antes de que...- no pudo terminar la frase cuando las alarmas de la mansión se habían activado.

- Joder, vámonos, corran- no lo pensó dos veces y cargo como costal de papas a Tae sintiendo como este lo pateaba y decía muchas maldiciones a su persona, corrió hasta entrar en la camioneta que los esperaba en una calle poco transitada cerca de la gran mansión, se subió rápido dejando a Kim a su lado y tapándolo con algunas mantas ya que hacía demasiado frío, la nieve caía pesadamente, el clima cada vez se ponía peor pero Jeon no se rendiría.

- Aron detente aquí- después de un viaje de aproximadamente una hora hicieron una parada en una carretera desolada, todos se preguntaron el porque Jungkook había hecho una parada en un lugar tan siniestro. - Nos dejarán aquí, sigan ustedes y encuentren un lugar donde descansar, yo les avisaré cuando vengan por mí- pidió con una sonrisa.

- ¡Estás loco si piensas que me bajaré contigo en un lugar tan horrible, por dios podrían salirnos seres de otro mundo! ¡¡Loco!!- aterrorizado Taehyung se apegó más a la puerta contaría a la que Jeon tenía abierta, este rió y se agarró el rostro un tanto frustrado, no tenía el tiempo suficiente como para una rabieta.

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