67🧙🏻‍♀️

341 37 6
                                    

Al fin la verdad. Tirado con la cara contra la polvorienta alfombra
de la oficina donde una vez creyó estar aprendiendo los secretos de la victoria, Harry entendió al fin que no estaba destinado a sobrevivir. Su tarea suponía ir tranquilamente en busca de un abrazo de bienvenida dado por la muerte. A lo largo del camino, debía deshacerse de los vínculos que mantenían a Voldemort vivo, de modo que cuando se interpusiera él en su camino, sin levantar la varita a modo de defensa, el final fuera limpio, y el trabajo que debería haber sido hecho en el Valle de Godric, quedara acabado. Ninguno viviría, ninguno podía sobrevivir. Sentía el corazón palpitándole ferozmente en el pecho. Qué extraño era que, en medio del pavor de la muerte, palpitara con máximo esfuerzo, manteniéndolo gloriosamente vivo. Pero habría de parar, y pronto. Sus latidos estaban contados. ¿Cuánto tiempo le quedaba para, mientras se levantaba y caminaba a través del castillo por última vez, atravesar los terrenos e ir al bosque? El terror lo cubría mientras se tiraba en el suelo, con el latido fúnebre de su interior. ¿Dolería el morir? Todas esas veces que había pensado que estaba a punto de ocurrir pero había escapado, no había pensado realmente en ello: su voluntad de vivir había sido siempre más fuerte que su miedo a morir. Con
todo, en ese momento no se le ocurrió intentar escapar, correr más que Voldemort. Se había acabado, lo sabía, y todo lo que quedaba era morir.

¡Si hubiera muerto aquella noche de verano en que abandonó el número cuatro de Privet Drive por última vez, cuando la noble varita de pluma de Fénix le salvó! ¡Si hubiera muerto como Hedwig, tan rápido que no se hubiera dado cuenta de qué sucedía! O si hubiera podido interponerse entre una varita y alguien a quien amara... Ahora envidiaba incluso las muertes de sus padres. Esta despiadada caminata hacia su propia destrucción requería una clase distinta de valentía. Sentía que sus dedos temblaban levemente e hizo un esfuerzo por controlarlos, aunque nadie podía verlo, pues los retratos de las paredes estaban todos vacíos.

Lentamente, muy lentamente, se incorporó, y al hacerlo se sintió más vivo y más consciente de su propio cuerpo que nunca. ¿Por qué nunca había apreciado el gran milagro que él mismo era, el cerebro, los nervios, el palpitante corazón? Todo eso desaparecería… o, al menos, desaparecería de él.

Su respiración se volvió lenta y profunda, y su boca y su garganta se quedaron totalmente secas, pero más lo estaban sus ojos. La traición de Dumbledore no era casi nada. Por supuesto que había un plan mayor: Harry había sido simplemente demasiado estúpido para verlo, ahora se daba cuenta. Nunca se había preguntado por qué Dumbledore lo quería vivo. Ahora veía que sus años de vida los habia determinado cuánto tiempo tardara en eliminar todos los Horrocruxes. ¡Dumbledore le había pasado el trabajo de destruirlos, y él, obedientemente, había continuado acabando con los vínculos que ataban, no sólo a Voldemort sino a sí mismo, a la vida! Cuán hábil y elegante había sido, para no perder más vidas, pero sí darle la peligrosa tarea al muchacho que ya había sido marcado para la matanza, y cuya muerte no sería una calamidad, sino un soplo contra Voldemort. Y Dumbledore sabía que Harry no iba a eludir su responsabilidad, que llegaría hasta el final, aunque fuera su final, porque se había tomado la molestia de conocerlo bien, ¿o no? Dumbledore sabía, igual que Voldemort, que Harry no dejaría que ninguna otra persona muriera por él ahora que había descubierto que la fuerza para parar todo aquello estaba en sí mismo. Se forzo a recordar las imágenes de Fred, Lupin y Tonks cayendo muertos en el Gran Comedor, y por un momento apenas pudo respirar. La muerte estaba impaciente...Pero Dumbledore lo había sobrestimado. Había fallado: la serpiente sobrevivió. Un Horrocrux aún ataba a Voldemort a la tierra, incluso después de haber matado a Harry. Cierto, eso significaría un trabajo más fácil para alguien. Se preguntaba quién lo haría... Ron y Hermione sabían qué debía hacerse, por supuesto... Ése debía ser el por qué de que Dumbledore quisiera que confiara en ellos dos... De modo que si él cumplía su destino un poco antes, ellos pudieran continuar...

Magic School2☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora