Naruto y Sasuke son destinados.
Naruto no lo sabe, y Sasuke no sabe como decírselo.
"Tal vez si horneas galletas para el..."
Cambios en la personalidad, omegaverse
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La paciencia era una de las debilidades más notables de Sasuke. Su paciencia se reducía a cero en cuestión de segundos, y no era para menos.
Había pasado una semana desde que le dió las galletas y la carta a su alfa.
¡Una semana!
Según Sasori le había dicho que Naruto estaba demasiado ocupado con las clases y las prácticas en el restaurante que apenas tenía tiempo de hablar con ellos.
Cabe mencionar que como había prometido, Sasuke le pagó al alfa una semana entera de desayunos gratis. Lo peor es que Sasori ni siquiera hizo un esfuerzo por apiadarse de su billetera.
(Realmente si lo hizo, pero Sasuke no lo veía de esa manera)
Estaba muy ansioso.
Había hablado con sus padres y hermano, los extrañaba bastante así que nunca se olvidaba de hablar con ellos al menos una vez al día. Siempre le recordaban que se debía mantener saludable y seguir centrado.
Había estado aprendiendo nuevas técnicas de repostería francesa, eran bastante complejas así que necesitaba concentrarse en eso y practicar lo suficiente.
Ino seguía igual de eufórica que antes, seguía hablando de Sai, él comenzaba a pensar si lo mejor sería decirle la verdad, pero no, no le correspondía hacerlo, Sai lo quería de esa forma, hablar de la mejor manera con ella, después de todo, y a pesar de haber ya encontrado a su destinado, el alfa no traicionaria a la omega.
Sasuke confiaba en que saliera bien, no quería que hubiera resentimiento entre ellos, confiaba en que Ino lo comprendería.
Otra gran noticia fue que su querido Euji había comenzado hace dos días con clases de defensa personal. Él siempre había sido alguien muy atlético, practicaba cientos de deportes y otras cosas más, así que no le sorprendía en lo absoluto.
