El Comienzo de un Gran Cambio

560 21 6
                                    

El sol altivo en el celeste cielo ilumina a toda la ciudad, menos al oscuro y triste corazón de Jane Tyler. A pesar de que finja ser mala frente a todos, su alma es débil, ella es débil, y no había parado de llorar en toda la tarde por lo que le hizo a la pobre Kenzie.

-    ¿Jane Tyler está todo bien?- pregunto su Alia al otro lado de la puerta, era entendible que se preocupara ya que apenas entro en casa tiró sus cosas y corrió a encerrarse a su habitación.

-    Todo bien Alia no te preocupes- contesto tratando de que no se notara en su voz que estaba llorando.

-     Bueno si necesitas algo estoy en la cocina- añadió su hermana con su habitual empatía y carisma, ojala yo pudiera ser buena como ella, pensó mientras se acurrucaba en el asiento junto a la ventana. Pero no ella siempre tenía que lastimar a todos, las dagas salían de su boca sin ella darse cuenta y lastiman a quien menos lo merecía, y todo por no poder controlar ese impulso de dar a creer que ella era mejor que los demás y de que nada le lastimaba, cuando eso era la mayor mentira que alguien pudiera decir.

Pasaron horas y horas en las que la adolescente lloraba sin calma alguna, sufriendo por el mal que había hecho, lamentando sus palabras y hasta su vida. La tristeza le invadía todo el cuerpo y las lágrimas caían, no solo era el dolor de haber destruido la relación de la pobre chica sino el saber que no era la primera vez que lastimaba de tal modo, el saber que ya han sido tantas personas las que habían sufrido por su culpa. Había hecho que despidieran al entrenador por un tonto enamoramiento pasajero, todo por culpa de ella.

                            …………………………………………………………………………………………

-    Hora de levantarse niña- gritó su nana al otro lado de la puerta y haciendo la misma acción con la puerta de enfrente.

Otro día más de seguir fingiendo fuerza que no tengo, pero todo sea por no volver a sufrir lo mismo que cuando era pequeña, esos horribles momentos en que los niños le decían cosas feas y le pegaban, no volverán a repetirse aunque eso cueste el sufrimiento de otros. Nunca logro superar ese verano en donde aprendió el significado del miedo y todo por culpa de unos niños que vivían cerca del parque al que ella iba a jugar de pequeña, esos mocosos la molestaban hasta hacerla llorar y no podía decirle a nadie porque eran los hijos del jefe de mi mamá, metería en muchos problemas a su mamá si hacía eso.

Un escalofrió recorrió su cuerpo recordando el sufrimiento que afrontaba con tan solo seis años, quitando esos pensamientos de su cabeza se dispuso a prepararse para otro día más de instituto vistiendo elegante y glamurosa como siempre hacia para que al verme no tuvieran que decir nada más que halagos hacia mi persona. Me maquille bastante pero sin dejar de lado lo sencillo y baje a la cocina a desayunar.

-    Buenos días- salude al entrar en la cocina encontrándome con Alia sentada devorando su comida y a mi nana sonriendo mientras servía mi desayuno.

-    Bueno días mi niña ¿cómo amaneció la princesita?- pregunto usando el apodo que tanto odio y eso es porque en el living de nuestra casa hay un cuadro enorme que enmarca a una Jane Tyler de cuatro años cubierta de lodo con su traje de princesa que usaba para ir a todos lados.

-    Si, gracias por preguntar nana- le sonreí comiendo de mi delicioso desayuno, al terminar subí a lavarme los dientes y baje agarrando mi mochila mientras me despedía de todos.

El viaje fue corto gracias a mi hermoso Mini Cooper regalo de cumpleaños número diecisiete, estacione en el lugar de siempre junto a mis falsas amigas, no sé si se les puede llamar “amigas” a perras que solo están conmigo por la popularidad pero me ayudan a seguir fingiendo y no demostrar debilidad alguna.

-    Amiguis llegaste- grito con su irritante voz Heidy dando saltitos hasta llegar a mi lado y hacer ese tonto beso en el que no se tocan las mejillas, díganme que no soy la única que lo cree estúpido.

-    Hola Heidy, Vee- las salude con voz chillona que usaba cuando hablaba con ellas.

-    Tengo que contarte muchas cosas- comenzó a parlotear Vee con una emoción exagerada mientras contaba lo que había pasado en casa de su mejor amigo anoche, como era típico mis pensamientos estaban debatiendo nuevamente si era necesario seguir con esta falsa de demostrar cosas que no soy, de fingir ser amigas de perras irritantes, de lastimar a todos para que no me hieran a mi.- ¿Jane Tyler me estas prestando atención?- cuestiono una Vee enojada.

-    Lo siento no he dormido mucho y mi cabeza no está muy activa esta mañana- me excuse fingiendo que bostezaba.

-    No hay problema a mí me pasa eso a veces- siempre diría yo- y mucho más cuando se piensa en guapos como el entrenador- añadió con sonrisa burlona.

-    Maldita perra como te atreve a burlarse sobre eso y mucho más cuando ayer me habían abandonado excusándose de que si estaban junto a mi empezarían a vincular lo que yo había hecho con ustedes, y después se viene arrastrando pidiéndome perdón porque saben que la popularidad para ustedes depende de lo que hagan pero la mía es por siempre- les grite con la furia apoderándose de mí.

-    La única perra eres tú que se acuesta con un profesor- me grito Heidy- tú no eres popular solo hablan de ti por ser una perra.

-    Habla la que se acostó con su primo mientras sus padres estaban en la otra habitación comiendo.

-    Como te atreves a contar eso maldita perra- grito avanzándose sobre mí y tirando de mi cabello, y justo en ese momento supe que ya no quería más de esto, era el momento de terminar con la falsa y ser quien soy realmente, perra pero buena por dentro.

La pelea se estaba tornando salvaje ya no solo eran jalones de cabello ahora había arañazos patadas y mucha gente rodeándonos mientras nos alentaban a seguir. Cuando de pronto siento unos brazos en mi cintura y de un momento a otro estoy siendo cargada por un desconocido.

-    Se terminó el espectáculo, vamos dispérsense - grito el desconocido-  agárrala fuerte no se te vaya a escapar que está demasiado alterada- le dijo a otro chico que estaba sosteniendo a Heidy mientras ella me gritaba groserías.

-    Suéltame- medio grite- ya estoy bien y calmada.

-    Espere señorita- me dijo volteándome haciendo que mire sus oscuros ojos rasgados- prométame que no intentara golpear a nadie- dijo mirando fijamente mis ojos con una hermosa sonrisa en su rostro.

-    Estoy calmada prometo no golpear a nadie si no es en defensa propia- respondí con una sonrisa, me soltó mientras soltaba una carcajada que fue música para mi oídos- soy Jane Tyler y muchas gracias por detener eso.

-    La chica popular como no conocerte- bromeo sin dejar de tener esa bella sonrisa en el rostro- soy Eric Pullman y de nada- me extendió la mano y sin pensarlo extendí la mía- estas lastimada- dijo tocando lentamente los rasguños que cubrían mi mejilla- ¿quieres que te acompañe a la enfermería?

-    Sería un placer que me acompañaras- le respondí regalándole la más grande de mis sonrisas sinceras, completamente sincera y feliz.

>

 

One Shot: Mi Plan DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora