La hija perdida de los Weasley (segunda parte)

torneo de Quidditch

Era un día algo frío pues un viento corría fuerte, en la calle de Hilandera Dakota se encontraba en la casa que estaba al final de aquella calle, la chica se encontraba tomando café leyendo libros de pociones

- ¿a que hora irás a la casa de los Weasley?- se esucho la voz de Severus

- pues...

Dakota miró el reloj de la pared para después volver a mirar a Severus

-en unos pocos minutos más- respondió

Ron la había invitado a quedarse a dormir en su casa para que no tuviera que levantarse más temprano de lo normal pero la chica obviamente aún no se sentía el 100% preparada para ver a Molly, pero hoy lo haría cosa que la ponía completamente nerviosa

-no muestres mucha emoción- mencionó Severus al notar el nerviosismo de la chica

Ella asintió con la cabeza y terminó su café para luego levantarse de la silla

-ya debo irme- dijo la chica tomando su mochila para ponérsela

-ten cuidado- dijo Severus

¿Cuidado? Se preguntó Dakota, esa palabra ya hace mucho dejo de ser tema por todas las cosas ya vividas anteriormente en Hogwarts, la chica se despidió de Severus para después abrir la puerta y salir de la casa.

Allí estaba enfrente de la casa de los Weasley, Dakota tomó aire para después soltarlo "tú puedes Dakota", se dijo así misma para después tocar la puerta, sus nervios se hicieron presentes pues las posibilidades de que la persona que abriera la puerta fueran Molly o Arthur eran altas, en esos momentos Dakota rezaba dentro suyo a que fueran algunos de sus hermanos, la puerta se abrió

-hola- dice la voz de Arthur cosa que hizo poner más nerviosa a la chica

-hola- dijo ella tratando lo más posible de que su voz no le delatara su nerviosismo

Antes de que Arthur pudiese emitir otra palabra se escucharon las voces reconocibles de George y Fred

-Dakota!!-gritaron ambos gemelos llegando al lado de Arthur

-oh Dakota un gustó en conocerte al fin-dijo Arthur

El señor Weasley se hizo a un lado para que Dakota entrará cosa que la chica hizo, miró en sus alrededores realmente el sólo pensar de que si no hubiese pasado lo que pasó aquél día en su nacimiento ella estaría viviendo bajo esté techo también, cuando Dakota sintió que sus lágrimas caerían al emocionarse escucho una voz a pesar de que era la primera vez que la escuchaba sabía de quién era

-Arthur ¿quién tocó la puerta?- preguntó Molly

-oh es Dakota por fin tenemos el honor de conocerla- dijo Arthur

Con una gran fuerza de voluntad Dakota se giró, su pelo estaba escondido con el gorro de su chaqueta, Molly se acercó a ella cosa que hizo poner más nerviosa a la joven

-Dakota...-susurró Molly mientras miraba a la chica

-hola un gusto conocerla señorita Molly- dijo Dakota estirando su mano

-el gusto es mío- dijo Molly para después hablar nuevamente

-te pareces a alguien que me gustaría poder tener conmigo ahora-dijo Molly

Eso último dicho aumento más sus nervios sabía quien era esa persona, en esos momentos no sabía que hacer o decir pero por suerte se escuchó la voz de Hermione salvando aquél silencio que se formó