Me desperte en una cabaña y me inmagine lo peor por ello decidi correr lo mas rapido que pude hasta estar a unos cincuenta metros de la cabaña pero que aun la pudiese ver para vigilar quien entraba y me lleve una gran sorpresa al ver que era un elfo y que se asustó mucho al ver que yo no estaba. Salió a lo que parecía buscarme pero al no encontrarme volvió a la cabaña y no volvió a salir, o eso me pareció porque de repente estaba tras de mi con una sonrisa de oreja a oreja mirándome cómo si fuera su hijo. Al principio me asusté de esa mirada pero me di cuenta de que ese anciano no me podria hacer nada pero entonces me dijo:
- que alegria ya despertaste, creí que por tu desnutrición no sobrevivirías.
- gracias porque ¿Has sido tu quien me ha cuidado verdad?
- si te encontré tirado en medio del bosque en un principio te creí muerto valla sorpresa me lleve cuando escuche tu respiración, a por cierto ¿como te llamas?
- me llamó Edwin ¿y usted?
-me puede llamar maestro.