Si leo mucho me suben las dioptrias, si canto/grito me da afonía, si me doy un baño en el río no sé quien me estará mirando: si el lagarto o la lagarta. Pero no me gustan los delantalitos blancos. Escuchar está bien pero te quedas sordo. A todo le podemos sacar el "pero" yo prefiero comerme una pera y a fregar. Sobretodo si me cae de un árbol y me da en el cogote.