🪕🦝

261 9 7
                                    

Pov Villa:

Ahí estaba yo, caminado por las calles empolvadas llenas de chicles viejos que los ciudadanos dejaba caer al suelo cuando de pronto un olor muy peculiar invadió mi ser: tamales. Imposible resistirse a una tentación así.
Me acerqué hasta el puesto de donde provenía el aroma y un chico alto con un sombrero me atendió muy amablemente

-Bienvenido a tamales "El mapache" que le puedo ofrecer? - me preguntó, y yo solo le dije que me diera un guajolocombo de verde, en cuanto me lo dio salí corriendo diciéndole que me lo anotara en la lista. Me sentí mal por el sujeto pero era la única forma de conseguir comida gratis. Lamentablemente en mi huida choqué con alguien.

Just a Morat silly storyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora