Día 1 sin ti
Te echo tanto de menos que en mi reloj aún es ayer.
Día 2 sin ti
No salgo de la cama
Aún estás conmigo
Tan guapo
Aunque también en mis pesadillas.
Día 3 sin ti
No llamas
Y todo, las canciones, mi cama, la pena, mi pecho, tu nombre, mi nombre con el tuyo, tus fotos, mis trozos, nuestros restos
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Día 4 sin ti
Me abandonaste a las tres.
El reloj lleva tres días marcando las tres y cinco.
Día 5 sin ti
Tu ausencia aplastando mis entrañas.
Pareciera que han pasado 90 años.
Día 6 sin ti
Hoy solo he llorado escuchando a Ismael
y leyendo a Julio
Voy mejorando.
Día 7 sin ti
Mi madre me ha besado las ojeras
y he salido del ataúd que es mi cama sin ti
dejando en mi almohada una nota de resurrección.
Día 8 sin ti
Me he ido a dar un paseo
ha llovido como si le hubieran roto el corazón al cielo
y he comprendido que uno es donde llora
pero siempre querrá ir a donde ríe.
Día 9 sin ti
No te olvido
pero hoy he vuelto a reír de nuevo
y he sentido un anhelo reconfortable al abrir la ventana
como si el aire barriera los fantasmas del suelo.
Día 10 sin ti
He dejado de huir
porque me he dado cuenta que soy la única que me sigue
Tu recuerdo tampoco se ha quedado atrás
Creo que me acerco a la meta.
Día 11 sin ti
Me he olvidado que te estaba olvidando y te he olvidado
Almenos hoy
He bebido demasiado vino.
Día 12 sin ti
Hoy he conocido a alguien
Soy yo
Voy a darme una oportunidad.
(otra)
Día 13 sin ti, Está siendo el más difícil. Ya he llegado a la meta, No entiendo por qué no me fije un objetivo más largo. Hoy ya no duele, pero el recuerdo pesa, y las fotos, y los audios.
Lo curioso que algunos amores solo podrían haber sido posibles en el momento exacto en el que aparecieron, Lo que mas me gustaba de ti es que parecías estar tan solo como yo, y te daba igual, como a mí. Nadie buscaba a nadie. Y nos enredó. O fue el hilo azul. Cuando me perdiste (nunca me había referido así a esto) (es más espero no haberte perdido) creí que estaba perdiendo una parte de mí nueva que ya nunca más recuperaría. Llegaste justo cuando creía que ya era incapaz de sentir algo. Llegaron las descargas. Tocarte era como meter los dedos en el enchufe; solo quiero seguir electrocutándome.
