Terremoto Turquesa ~ (Pimp Flaco y tú)

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Narra Flaco:

Me sequé las lágrimas, sacudí mi cabeza y pensé en que si seguía ahí parado, llorando, entonces jamás podría hablar con ella porque se habría ido.

Bajé todas las cuestas y rampas, hasta llegar donde estaba mi coche, ellas estaban en su coche, subidas y abrazadas, ______ llorando, me daba cierto temor acercarme, alomejor le estaba haciendo daño volviendo a por ella. Aún así, me acerqué, sin pensarlo más, me vieron por el retrovisor, salió Lorena del coche, se me acercó y me dijo:

- Lorena: buena suerte Dani, está mal, muy mal, se siente culpable y bueno... Yo me voy, cuídala, solo te digo eso -asentí, se metió en el coche y ésta vez salió _____ del coche.

Le abracé y le dije en el oído que todo iba a estar bien, que no llorase porque no la quería ver así, que yo había venido a pedirle perdón por lo capullo que he sido todo el tiempo con ella.

Cuando se calmó y paró de llorar, nos separamos y subimos a mi coche, arranqué y le pregunté:

- Flaco: ¿dónde te apetece ir? -le dije regalándole mi mejor sonrisa
- _____: no sé por qué todavía me buscas... O por qué todavía me quieres, no te entiendo Dani... ¿Enserio quieres pasar tiempo conmigo o ir a algún lado? -dijo mirándome atentamente, asentí
- Flaco: te busco porque me interesas y me importas, porque me gustas y porque me haces muy feliz... Porque contigo todo me apetece.
- _____: -se sonrojó y llevó su mirada al suelo- no te creo
- Flaco: deberías creerme, porque estoy loco por ti. Creo que te lo he demostrado y todos lo sabemos ,que, por muchas que vengan, la única que me hace sentirme tan especial eres tú -le confesé
- _____: ... entonces...? -me miró ésta vez, yo ya me veía venir lo que me iba a decir, me estaba preparando- ¿dónde vamos? -le miré mal y ella carcajeó muy fuerte
- Flaco: eres muy mala, has echo que me cree ilusiones -dije haciendo muecas de dolor, ella se acercó y me dio un tierno beso en la mejilla que hizo que mi cuerpo se erice al instante, me sonrojé y ella río nuevamente. Me encantaba poder estar así con ella.

Pensé en llevarla a comer, pero aún era muy pronto, así que íbamos primero a mi casa y luego iríamos a comer, espero que le parezca bien el plan.

Llegamos a mi piso, ella no dijo nada, por el camino le expliqué el plan y accedió sin problemas. Aparqué, bajamos y subimos por el ascensor. Una vez que llegamos, abrí la puerta y le dejé pasar a ella primero.

Su cara reflejaba mucha felicidad, al parecer hace mucho que quiso venir aquí. Escuché a Teo de fondo, hablar con alguien en su habitación, ______ se sentó en el sofá con Eevee y Dora. Yo me acerqué hasta la puerta de la habitación de mi hermano, me quedé ahí para oír de qué hablaban:

- Kinder: qué!??!? No! No se nada de él... ¿Le has llamado?... Ya, entiendo... Aún así, gracias, si sabes algo de Toni o alguno de entera de algo, llámame por favor -colgó y salió, frunció el ceño al verme ahí, escuchando todo.
- Flaco: qué pasa?
- Kinder: no es asunto tuyo y que sea la última vez que pones la oreja Dani, te advierto -dijo para salir y pegarme un empujón- hola _____! ¿Todo bien?
- ______: sí, y tú qué tal?
- Kinder: bien, muy bien, bueno, me voy, me alegro mucho de verte! Adiós! -dijo cogió las llaves y salió de casa. Me dirigí a la sala de estar para sentarme junto con ______.
- ______: pasa algo? -dijo al verme tan distraído y hundido en mis pensamientos
- Flaco: escuché a mi hermano hablar con alguien, diciéndole que si sabe algo de Toni que le avisara. Creo que le ha pasado algo
- _____: sí ha echo algo, o le ha pasado algo, es por mi culpa Dani... Él me amaba y me tuvo que dejar porque yo a él no, y porque mientras estaba con él pensaba en ti... Todo es mi culpa -se tapó la cara y comenzó a llorar, yo la abracé fuerte- ¿te acuerdas el día de la fiesta? ¿Cuando me dijistes esas cosas? Pues tenías toda la razón Dani, tienes toda la razón... -le levanté la cabeza para que me mirase a los ojos y le respondí:
- Flaco: eso estuvo mal, entre otras cosas, porque no es cierto lo que dije, no estaba en mis mejores condiciones y no sabía ni le que dije. Todos te necesitamos y no has echo mal a nadie, al revés, a todos nos ayudas a sacar una sonrisa todos los días. Olvida lo de la fiesta, por favor, sabes que no es verdad y que me equivoqué. Seguro que a él no le pasa nada, sabe cuidarse -se relajó un poco más y me atreví a hacerlo, me acerqué y cogiéndole las manos besé esos labios que tanto extrañaba y que tanto deseaba.

Estuvimos un rato así, no queríamos separarnos el uno del otro, nos separamos por falta de aire y nos reímos, estábamos nerviosos, como si fuera la primera vez que nos besamos. Nos fuimos a mi habitación y nos tumbamos en la cama, abrazados y enseguida acabamos dormimos, ojalá parar el tiempo y que ésto durase siempre.