XVII

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El día había llegado. Ya estaban en su barco listos para zarpar a Onigashima.

--Será una de las mejores batallas que se vayan a recordar en Wano Kuni --aseguró Kin'emon.

Ya era casi de noche cuando el barco zarpó con dirección a Onigashima. Por el camino se encontraron a la tripulación de Kidd.

--¡Ooooi, Kiiiidd! --llamó feliz Luffy al pelirrojo, quien lo miró unos segundos antes de volver su vista al frente.

El tiempo no estaba de su lado. Una gran tormenta se hacía presente.

No llevaban ni media hora de viaje cuando pudieron ver barcos enemigos a lo lejos. Sin mucho problema Sabo los hundió y siguieron su camino hasta que vieron el cráneo de la isla a lo lejos.

--Un dragón debe llamar a otro dragón para el enfrentamiento --habló Sabo antes de elevarse en el cielo mientras el resto seguía el camino.

Una vez en su forma completa de dragón Sabo rugió con todas sus fuerzas en dirección de la isla, acercándose en un vuelo lento.

En Onigashima, a pesar del ruido de la fiesta, aquel rugido fue demasiado claro.

Kaido elevó la vista con una mueca de pura molestia.

--Kaido-san ¿qué fue eso? --preguntó Queen.

--El rugido de un dragón cuando busca pelea --gruñó, dejando su jarra de sake en el suelo y poniéndose en pie.

Sin esperar más adoptó su forma dragón y voló fuera de la isla, viendo al que sería su enemigo acercándose con cautela.

Todos quedaron asombrados al ver a ambos dragones enfrentarse. Fácilmente Sabo era lo suficientemente grande como para que el cuello de Kaido entrara entero en sus fauces, lo cual era bueno para ellos.

--¿¡Quién eres y cómo te atreves a enfrentarme!? --rugió Kaido.

--¡Soy quien le pondrá fin a tu tiranía y devolverá Wano Kuni a quien le pertenece! --devolvió el rugido.

Esto enfureció al otro dragón, quien comenzó a preparar su bola ígnea.

Sabo no se amedrentó por eso y preparó su propio rugido, acumulando agua en su boca que saldría directa cual rayo. Cuando vio como Kaido estaba a punto de lanzarla él lo imitó y ambos rugidos colisionaron, convirtiéndose en un concurso de fuera para ver quien golpearía al otro.

Mientras los seres mitológicos luchaban, el barco de ambos piratas llegaba a Onigashima, descendiendo.

--Esperad aquí, Ace y yo nos encargaremos --se dirigió Luffy a todos, incluyendo a los piratas de Kidd.

--¡Estás loco si piensa que me quedaré quieto, Luffy! --rugió Kidd.

--Si quieres entrar no lo impediré, pero no te metas en nuestro camino --esta vez dijo Ace.

Antes de que nadie pudiera refutar eso los hermanos echaron a correr hacia el interior del cráneo, encontrando de lleno a todos en plena fiesta.

--Ace, hora de integrarse --sonrió cínico el D. menor.

--Estoy de acuerdo.

En medio de la fiesta se escuchó con gran fuerza un inmenso rugido y aullido que retumbó por encima de la música y de la muchedumbre. Todo se detuvo después de eso, buscando a los dueños de ambos sonidos.

Ambos hermanos adoptaron su forma híbrida y comenzaron a correr entre el gentío, yendo directamente a por los grandes.

--¿Quiénes son esos? --habló Queen mientras veía a los animales correr.

Avanzando con nuestra familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora