Capítulo 21

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El auditorio estaba lleno por familiares de los chicos, algunas personas del medio, simples espectadores y demás. Latte no mentía cuando decía que era un evento cultural grande.

Daría comienzo en un rato más, así que estaba esperando detrás del escenario con algunas personas más.

Mandó algunos mensajes a sus padres y amigos, pero le empezaban a doler los oídos por tener que escuchar gritos extremadamente agudos al lado.

Suspiró.

"Hay un chico guapísimo en la audiencia"

"No, ¡parece que son dos!"

Había varios chillidos de emoción entre las chicas, e incluso entre algunos hombres del staff; todos estaban amontonados sacando la cabeza para ver a la audiencia. Ella también quería ver, pero al estar tantas personas en ese pequeño espacio era imposible conseguir un rango de visión decente, así que terminó rindiéndose.

"Me calienta más que el sol de verano..."

"¡Sus caras parecen talladas por los mismos ángeles!"

Si producían esas reacciones ¿serían Rondemio y Kenneth? Del primero tendría sentido, pero ¿Kenneth? ¿Ahí? Le lloverían chicas en leotardo y algo peligrosas. Entonces... ¿Arwin? Miró a Ibelin que no parecía muy interesada en averiguar quiénes producían toda esa fiesta de hormonas, se veía más bien seria; pensó que era porque se sentía nerviosa.

Tal vez ella ya sabía bien de quienes se trataba porque ella misma los había invitado.

Quizá seguía hablando con Arwin más de lo que creía.

"¿Qué les dan de comer a los jóvenes de hoy en día?" Susan regresaba de la horda, dándose aire con un programa "Si hubieran existido hombres así de guapos en mi juventud no tendría solo dos hijas"

"¡Mamá!" Esula se cubrió la cara, avergonzada.

Uno de los organizadores, al fin, logró disipar a los que seguían deleitándose con los chicos guapos, aunque el pobre terminó casi siendo comido vivo.

Siempre era divertido ver el drama que tuviera que ver con los peces, siempre que fueran cosas cómicas y no trágicas.

Aprovechando que al fin estaba libre decidió asomarse, buscando a sus invitados. Dio una rápida mirada por el público, en los primeros asientos estaban sus padres, que jamás se perdían una presentación de ella.

Su cara se torno oscura cuando vio a su padre; lo había hecho.

Suspiró, no otra vez.

Siguió pasando su mirada chocolate entre los presentes buscando a sus amigos, mientras husmeaba afirmó su suposición: Arwin y Rondemio estaban ahí. Por algún motivo no estaban juntos, así que el aura brillante estaba distribuida en dos, lo que era tranquilizador para ella.

Al menos así no dejarían ciegos a tantas personas.

Gracias a Arwin, dio con Cano y Macchi, que estaban unas dos filas detrás de donde él se sentaba, saludándola agitando las manos. Sonrió ampliamente y devolvió el gesto, igual de emocionada.

No contó con que, al parecer, el condenadamente bello genio creyera que el saludo era para él.

Arwin levantó la mano en algún ademan más tranquilo, por algún motivo sonreía con cierta diversión.

Técnicamente no tenía nada de malo, pero como que algo no cuadraba.

Solo por precaución, volteo detrás de ella para comprobar que no estuviera saludando otra persona, pero era la única ahí, así que debía ser para ella.

Is she a Bridesmaid?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora