Capítulo 21

11.4K 1.5K 2.2K
                                    

Daniel

La escena frente a mis ojos me deja paralizado, intento moverme, acercarme y ayudarla, pero no puedo hacer nada, es como si unos brazos invisibles me inmovilizaran, la impotencia se apodera de mí y un nudo se forma en mi garganta. Quiero gritar, exigirle que la suelte, pero nada sale de mí.

—¡Daniel!

Un hombre tiene a Sam y no deja de tocarla a la fuerza, ella llora desesperada pidiéndome ayuda a gritos. Me trato de soltar de lo que sea que me sujeta, pero es inútil. Sam deja de luchar y me mira fijamente, su mirada está vacía y las lágrimas caen de sus ojos, siento como si me clavaran un puñal en el estómago.

— ¡Sam!

La voz al fin me sale, pero es tarde, algo me arrastra alejándome de esa escena, grito fuera de control su nombre, una y otra vez.

Despierto sobresaltado, el sudor cae por mi frente y mi respiración esta agitada, me giro buscando su cuerpo por la cama y no lo encuentro, me levanto y grito su nombre. Comienzo a recuperar el sentido y la realidad llega a mí de golpe. Sam no está, no está porque yo la hice marcharse. Me siento en el borde la cama y sujeto mi cabeza entre mis manos. Tres noches llevo teniendo la misma pesadilla y la idea de que algo pueda pasarle no abandona mi mente.

Miro la hora en el celular, ya son las seis de la mañana y no tiene sentido volver a dormir. Camino al baño para tomar una ducha, una vez listo me visto y me preparo un café. Logan entra a la cocina frotándose los ojos.

— ¿No piensas volver a tú casa?

—No.

—Ya estoy bien.

—Dile eso a tus gritos que no me dejan dormir.

Logan se ha quedado conmigo desde que Sam se fue del pent-house, ese día me encontró tirado en el piso acabando las botellas de whisky del bar y dijo que se quedaría aquí para que no hiciera alguna estupidez.

—Le contaste a Sam lo del compromiso.

—Sí.

—No tenías que hacerlo.

—Yo pienso que ella merecía saberlo—Se queda callado y luego continúa—Así puede rehacer su vida.

Aprieto los puños recordando al imbécil que la invito a salir.

—De eso nada.

Logan me mira molesto.

—No seas un imbécil, tu tomaste una decisión.

—Sabes que lo hice por papá.

—¿Y por eso ella debe esperarte o algo así?

—No, pero....

—Pero nada, ella merecía saberlo y yo se lo dije—Me mira más comprensivo—No te estoy juzgando, Daniel.

—No podía negarme, Logan. Papá me ha dado todo sin pedir nada a cambio, siempre me dio su confianza y su apoyo, no podía fallarle ahora.

El suspira.

—Lo sé, el merece que le des todo, todo menos tu felicidad y tu felicidad no está al lado de una mujer que no conoces.

—Ya la conocí.

Él rueda los ojos.

Lo cierto es que hace 3 días nos presentaron a mí y a Lily García, era una chica linda y agradable, pero nuevamente no era Sam.

—No me meteré en tus asuntos, Daniel.

Asiento y termino de tomar mi café. Cuando ambos estamos listos tomamos nuestras cosas y nos vamos a la empresa. Paso toda la mañana de Reunión en reunión, además de que debo buscar el nuevo reemplazo de Alexa. Por la tarde Logan llega a la oficina.

Forzados a odiarnos (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora