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Las ráfagas de viento azotaban su cuerpo con violencia haciendo que su cabello ondeara con fuerza como si se tratase de una declaración de guerra

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Las ráfagas de viento azotaban su cuerpo con violencia haciendo que su cabello ondeara con fuerza como si se tratase de una declaración de guerra.

Una pequeña risa salió de sus labios mientras observaba desde la punta de aquel edificio como el cielo se tornaba gris y la embriagante sensación de libertad se extendía por todo su cuerpo. Procuraría que aquella sensación le perdurara en su pecho cuánto tiempo sea necesario para evitar que se hundiera.

La molesta armonía de la ciudad vibraba en su piel y las luces tenues de la apuesta de sol le calentaban el pecho.

¿Cómo podía sentirse tan fenomenal cuando ella ya no tenía nada por dentro?

¿Cómo podía sentirse tan viva cuando se desangraba y un vacío negro y placentero la arrastraban solo hacia la oscuridad?

Porque ella adoraba sentir aquella adrenalina.

Adoraba el olor a sangre

Adoraba el dolor esparcirse en su cuerpo.

Adoraba ver las cabezas antes de explotar

Adoraba ver las cuencas de los ojos vacías.

Sonrío para si misma observando con curiosidad como el paso peresoso de las personas bajo ella era tan despreocupado, tan pacífico, tan irritante.

Personas de ida y vuelta a sus trabajos, de vuelta a sus casa, de vuelta a ver a las personas que los amaban, de vuelta a pecar y huyendo de aquellas garras en las esquinas oscuras.

Nadie estaría preparado para cuando ella soltará sus dados.

Nadie estaría preparado cuando ella empieze a jugar.

-¡EXPLICAME PORQUÉ MIERDA NO PUEDO TENER ACCESO A LOS ARCHIVOS!- Sus gritos no hacía nada más que el idiota por el teléfono tartamudeara y titubeara al hablsr, quizás luego recibiera una reprimenda del departamento de policía pero su humor se habí...

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-¡EXPLICAME PORQUÉ MIERDA NO PUEDO TENER ACCESO A LOS ARCHIVOS!- Sus gritos no hacía nada más que el idiota por el teléfono tartamudeara y titubeara al hablsr, quizás luego recibiera una reprimenda del departamento de policía pero su humor se había ido por el caño al leer el título del periódico por la mañana, sentía como su sangre le hervía por dentro.

La imagen de aquel hombre aplastado hasta morir, torturado hasta la muerte y con aquellas iniciales en todo su cuello le atormentaban desde que había pisado aquella escena.

𖠣𖢦вυяу ᴀ ғʀɪᴇɴᴅ𖢦𖠎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora