• 911 LOVE. •

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Capitulo 6.

Josephine.

Hero nos lleva hasta un pequeño local pero bonito, con vista a una pequeña laguna.

Estaciona la moto y le pone seguro, baja y me da la mano para ayudarme a bajar. Le agradezco con una sonrisa y caminamos hasta el local, entramos y por suerte no está muy lleno de gente.

No es que no sea una persona social o que no disfrute de los lugares donde está muy lleno, pero a veces está bueno poder encontrar un lugar tranquilo donde charlar y disfrutar de la compañía del otro, en este caso Hero.

Él me mira y dice.

—¿Te parece bien este lugar?.— si dice algo más con ese acento británico que creo que tiene, me voy a desmayar.

—Si... está bien, podemos sentarnos allí.— digo y señaló una mesa que está contra una pared, tiene una ventana a su lado y da el sol. Perfecto.

—Vamos entonces.— listo, ahí está su acento otra vez. Ya caí.

Caminamos hasta la mesa que elegimos y en unos segundos después de acomodarnos, llega una chica de unos veinte años, pelo azul y ojos negros. Se presenta y se llama Erica, nos dice que ella será nuestra mesera y después de hacerle ojitos bonitos a mí compañero de mesa, se va.

Okey, esto se puso incómodo.

—Con qué disfrutas de la atención femenina, ¿no?.— ¿que mierda acabo de decir? sone como una loca, debe pensar que estoy mal de la cabeza.

—¿Cómo dices?.— mi pregunta le pareció divertida, ya que después de decirme eso, mira hacía dónde la chica está, y después de parecer entender la situación, me vuelve a mirar. —Con que ya entiendo, y siendo sincero ¿quien no disfruta de un poco de atención? de seguro tu tienes mucha.—

—Si, demasiado mira que tanto que no me alcanzan los dedos para contar.— por favor, notese mi sarcasmo.

Erica vuelve a escena y nos tomó nuestra orden.

Hero la ignora, casi ni cuenta hace de qué está ella aquí. Y a pesar de su frustrado intenso queriendo llamar su atención recomendado a mí compañero el plato del día, él la ignora.

Ella se va frustrada y yo río ante la situación que acaba de pasar.

—Como estaba por decir, eres ebria y mentirosa. Pero bien, dejando de lado eso, dime pequeña sheina del mundo ¿quien eres y que tienes que hace que esté aquí contigo?.—

—¿Disculpa?.—

—Digo, dejé mi trabajo para venir hasta aquí.—

—¿Yyyyyy?.—

—Yyyyyy eso debe ser porque tienes algo que me interesa.— pero este chico quien se cree que es, si muy bonito tu acento británico pero tampoco eres, no se, el mismísimo Harry Styles.

Entonces pensé, lleve mis brazos hasta la mesa y apoyé mis codos en ella, hice un hueco con mis manos juntas y apoyo mi cabeza en ellas, pestañeo y mirándolo fijo, digo.

—No sé, dime tu que tengo que te interese.— el sonríe de costado y cuando iba a responder, nuestra mesera se acerca con nuestros pedidos.

Hero nos despega sus ojos de los míos ni por un solo segundo, le agradezco a la chica y se va.

—Deja de mirarme así, o tendré que acabar con tu comida también.— me advierto y después de robarme una papa frita de mi plato, deja de mirarme y comemos en un cómodo silencio.