Prólogo

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Habiamos terminado de una extensa práctica de fútbol. Me alegraba por disfrutar de estos pequeños momentos ya que con la llegada de Hiram, todo el problema con el circulo rojo, el enmascarado y las serpientes, casi no tenía tiempo para ser un chico normal de instituto.

Reggie me extendió una botella de agua fría y le agradecí para luego beberla.
Los chicos comenzaban a ir hacia el vestuario, iba a seguirlos cuando unas voces conocidas llamaron mi atención.

No fue difícil describir de dónde provenía. Debajo de las gradas se encontraban Betty y Jughead peleando. Hice una mueca. Me sorprendía bastante que este, desde que estaba en el lado sur con su nueva escuela y en esa estupida pandilla casi no lo veíamos. Se había vuelto distante con todos. Antes quizás frecuentaba por Betty, pero luego de que terminaron (primero yo haciendo como intermediario y unos días después el lo hizo con ella oficialmente luego de ese baile) ya no lo veíamos.

Betty estaba llorando. Apreté mi puño. Nadie podía hacer llorar a Betty. Odiaba que alguien lo hiciera. Decidí acercarme para ver lo que sucedía.
El fue el primero en anotarme, exclamó un "¡genial!"con sarcasmo.

A: ¿qué sucede, Betty?

J: ¿no deberías meterte en tus asuntos, Andrews? -auch- ¿no deberías estar haciendo estupidos grafitis de mierda en mi escuela a esta hora?

A: cierra la boca, Jughead. Si se trata de Betty, es mi asunto tambien

J: oh, vaya, mira quién llegó, el héroe del pueblo

B: ya basta, por favor -susurro con la voz rota-

J: espera un momento. Primero, lo mandas a el a terminarme y ahora viene justo cuando me dices esto. Que lista, Cooper. Déjale la responsabilidad al idiota, verdad? O es un truco para que vuelva contigo?

B: ¡eres un idiota, Jughead! ¿Acaso Toni y esa escuela de mierda te han lavado el cerebro?

J: quizás me hayan abierto los ojos. Al diablo con esto. Que el se haga cargo de su error

Para ese punto no entendía absolutamente nada. Intentaba procesar esa información mientras Jughead comenzó a caminar fuera del campo y Betty lo siguió.

B: ¿cómo puedes dudar de mi? ¿Como puedes hacer eso?

J: siempre lo hice. ¿Porque no ahora?

B: el lado sur te cambió...no eres mi Jughead

J: en eso te doy la razón. No soy nada tuyo. No me llames ni me busques. Soluciona tu problema

El se subió a su motocicleta y se marchó a gran velocidad. Vi a Betty terminar de romperse sobre la acera y fui rápidamente hacia ella, abrazandola.

A: no vale la pena, Betts. Es un idiota. No lo vale

Betty sollozo en mi pecho. Se apartó un momento para mirarme.

B: tu...tu no lo entiendes, Arch...lo necesito...estoy embarazada

Juntos - BarchieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora