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[Mansión Okami]

Tn salió del baño con una toalla envolviendo su cuerpo y otra en su cabello, entró al pequeño cuarto que fungía de armario y comenzó a buscar ropa. Dejó caer las toallas, se colocó lencería negra y revisó sus vestidos, hasta encontrar el indicado; se vistió con aquel vestido bodycon negro de tirantes y ajustado a su cuerpo, con escote semi-corazón y falda que llegaba hasta la mitad de sus muslos. Tomó un par de zapatos negros de tacón aguja y un corto abrigo blanco de piel; dejó ambos sobre la cama y fue al tocador. Se maquilló con base, delineado negro en sus párpados y sombra plateada con brillos, pintó sus labios de rojo, puso algo de rubor en sus mejillas y un poco de brillo en su pecho. Cepilló su cabello el cual ya estaba seco y lo dejó suelto, echando algo de brillo en él. Se pintó las uñas de negro y sonrió.

– Per-fec-ta –murmuró y rió.

Se colocó los zapatos y el abrigo, se echó algo de perfume y tomó su teléfono, para salir de su cuarto y bajar las escaleras. Los del tercer año habían preparado una fiesta, invitando además a los del segundo y primer año; ella no tenía ganas de ir, prefería quedarse en casa ya que no estaba de ánimos, pero se vio obligada a asistir por sus amigas, los chicos y porque era "la reina de "Ryoutei".

En la entrada de la casa encontró a su madre, quien parecía recién llegar.

– Madre.

– ¿...Saldrás?

– Hay una fiesta. Los chicos de la escuela.

– Ya veo...Bien, diviértete.

– Gracias.

– Sólo no te pongas ebria y uses tus poderes delante de los humanos.

– No te preocupes, mamá –sonrió.

– Bien –sonrió.

[Mansión Suzuki]

Tn bajó de la limusina y se adentró a aquella residencia, viendo que en el jardín ya había gente bebiendo, conversando y/o bebiendo. La música sonaba alto, seguramente los vecinos estaban molestos ante el ruido. Al entrar a la enorme mansión, sus amigas la interceptaron, una cruzó su brazo con el de ella y otra le entregó un vaso.

– ¡Te ves hermosa, Tn!

– Toda una reina, como se espera de ti.

La rubia rió.

– Gracias –bebió.– Entonces...adelante.

– ¡A beber!

Todas rieron, comenzando a caminar.

– Oigan... ¿El imbécil de mi fake-boyfriend vino?

– Sí, vino con Laito.

– Suzuki-san invitó a los seis Sakamaki, pero sólo vinieron ellos dos.

– Maldi...No, es genial –sonrió.

Todas la miraron, confusas.

– Me vengaré de ese imbécil...y haré que me termine. Entonces me liberaré de ese idiota y ganaré la estúpida apuesta.

– Eres mala, Tn.

– Mucho.

– Gracias, me halagan –rió y bebió.

[Cocina]

Ayato se encontraba comiendo frituras y bebiendo, conversando con algunos amigos. Había perdido a Laito hacía minutos, pero no le preocupaba, seguro andaba coqueteando o algo más con alguna chica.

Pride 🏆 Ayato Sakamaki 🐍🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora