CHAPTER THREE
stan, cariño, te están buscando______________________________
Esa noche Stanley se desveló pensando en su mejor amigo, en diferentes y perfectos escenarios que podrían experimentar, cómo por ejemplo, ellos dos en una gran pradera escuchando música; una baile escolar en el cual su pareja era Denbrough y se la pasaban bailando toda la celebración.
Él creía que nunca podrían decirle a el tartamudo sobre sus emociones, por más de lo lograra estamq completamente seguro de que el sentimiento no era mutuo. Por fin concilió el sueño, cayendo en los brazos de Morfeo con un un desagradable gusto en su lengua.
Al día siguiente se levantó con pesadez de la cama y siguió el rumbo hasta topar con la cocina, dónde se ubicaba su padre, el rabino. Movió su cabeza en forma de saludo pero no recibió respuesta alguna por parte del contrario ya que él se hallaba enfrascado en su periódico mañanero y no prestaba atención a nada más. Tiempo después salió a visitar las desoladas calles del pequeño pueblo.
No tenía un destino en si, caminaría por ahí buscando algo que lo atraiga. Finalmente llegó a la biblioteca, no solía pasearse por allí pero en ocasiones concurría al establecimiento por algún tipo de libro sobre aves, eran sus favoritos.
La mañana pasó rápidamente y el joven debía volver para el almuerzo. Estaba un poco cansado de la rutina, quería hacer algo divertido pero no sabía qué. Se encontraba enfrascado en su lectura cuándo el sonido del teléfono inundó la silenciosa cada de Los Uris.
¡Ring!
La madre del chico contestó.
- ¡Stan, cariño, te buscan! - gritó desde el comedor.
- ¡Ya voy! - devolvió sin ganas. Al bajar, encontró a su progenitora con el aparato telefónico, la cuál se lo entrego dejándole solo para hablar con tranquilidad, cosa que agradecía.
- Hey St-Stan.
- Hola Billy - su voz sonó un poco entrecortada por la repentina apareción de su enamorado a través de la línea.
- Quería p-preguntarte si qui-quieres sa-sa ¡Diablos! - se interrumpió por el nerviosismo - salir - siguió, luego de respirar profundamente - a tomar un helad-do, claro si q-quieres -
- ¡Claro que sí! - contestó con alegría y entusiasmo.
- Okay, nos ve-vemos en la plaza a l-las tres - finalizó.
El adolescente esperó con ansias la hora mientras se arreglaba. Peinó sus rizos un tanto, se colocó una camisa color crema con unos shorts y zapatos negros. Pidió aprobación de sus mayores, dinero para sus helados y partió para luego llegar a su destino.
Allí localizó a Billy Boy, se veía muy bien, aunque siempre era así, pero ese día sus verdes ojos brillaban dándole una sensación extraña en su estómago. De nuevo volvían esas mariposas.
- Llegas-ste - dijo.
- Creo que es un poco obvio - respondió sarcásticamente, provocando la risa de su acompañante.
- Vamos - Denbrough se notaba impaciente. Repentinamente la mano del castaño estaba unida a la de él, llevándole a el establecimiento con emoción, como un niño pequeño en una gran juguetería.
A Uris la acción lo tomó desprevenido, sin embargo no le disgustó, todo lo contrario le encantó y creyó que podría estar de la mano todo el maldito día con él sin cansarse. Su suave tacto y piel, con sus largos y finos dedos.
La heladería era sumamente grande, llena de gente divirtiéndose en cada una de las mesas.
- Bienvenidos ¿Qué desean? - cuestionó el heladero con una agradable sonrisa que ambos devolvieron.
- Yo q-quiero un con-no de frutilla, por favor.
- Yo de limón - pidió educadamente.
- Claro.
Los chicos caminaron a una apartada mesa y se sentaron. Ambos se miraban con profundidad mientras hablaban y reía. Sus ojos expresaban todo el amor que no admitían. Sus ojos los delataban.
En unos minutos los helados llegaron y los empezaron a disfrutar. De pronto Bill habló dejando, por unos segundos, sin habla a su contrario, siempre que el hablaba su corazón aceleraba y sus manos sudaban.
- De verdad me gustan tus ojos, son tan cálidos - el rizado se sentía en la cima, era tan dulce cuando quería y eso lo hacía querer besarlo - perdón B-bev me acon-nsejó que te di-dijera algo bonito per-ro si te mol-lesta, no lo volveré a r-repetir -
- Tú también tienes unos ojos muy bellos Bill.
Gracias por leer, feliz mes del orgullo ❤️✨🏳️🌈
-ffxiry
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alucinaciones, stenbrough
Romance( alucinaciones... 🪐 ) written by f-fxiry ...a stenbrough fanfiction '.could it be that you and me are the lucky ones?.' _______________________________________ "el alma le cayó a sus pies, brotando de sus ojos color miel unas lág...