Chica Insistente // Tsukkiyama

One-shot

Esa semana fue completamente extraña y un verdadero desastre, Tsukishima estaba bastante estresado por la situación y Yamaguchi estaba bastante nervioso y no sabía cómo salir de todo aquello, los pongo en contexto.

Tadashi después del entrenamiento había ido por un camino completamente distinto del que solía tomar junto a Tsukki, porque debía comprar algunas cosas para la cena, era una tarde completamente normal y tranquila, hasta que unos pasos más adelante, pudo observar como una chica estaba siendo acosada por dos chicos más grandes que ella, Yamaguchi no sabía de dónde había salido aquella valentía, simplemente había actuado sin medir las consecuencias por tratar de proteger a la muchacha. Solo recuerda haber corrido hacia la chica y la cubrió con su cuerpo, pidiendo a los chicos con voz molesta que la dejaran de molestar y que se retiraran; las cosas no habían salido como lo había esperado, ingenuamente había pensado que los chicos se retirarían pero nada es lo uno quiere, había terminado con un moretón en la mejilla que se veía dolorosa a plena vista, pero aun así, Tadashi se sentía bien porque no fue el único golpeado esa noche, ambos chicos también habían terminado con un labio partido y uno que otro moretón en sus rostros. Yamaguchi no era alguien de golpear o pelear en general, pero algunas veces algunos golpes eran necesarios.

La muchacha de nombre Akira era de Karasuno, se había dado cuenta después de que los muchachos se habían retirado del lugar, el uniforme de karasuno era inconfundible; Akira solo agradecía entre lágrimas, Tadashi solo acarició la cabeza de la menor y repitiendo que todo estaba bien. Guchi había decidió acompañar a la menor hasta su casa, para que se sintiera segura y que pueda descansar, cuando llegaron a la casa de Akira, él se despidió de ella rápidamente para ir a comprar de una vez por todas e ir a casa a ver su herida.

Cuando llego a casa, la madre del pecoso casi se desmaya al ver el golpe y la sangre seca de la nariz y labio de su hijo, Tadashi se había sorprendido, no se había dado cuenta que le habían roto el labio y que su nariz había sangrado.

— Cariño, mira como dejaron tu bella cara — dice la madre con voz preocupada y triste.

Tadashi no consideraba que su cara fuera bella, había escuchado por parte de Tsukki su rostro era bonito por las estrellas que adornaban cada parte de su piel, pero nada más y estaba seguro que sólo lo decía porque él era su mejor amigo.

Luego de agregar una crema que según su madre le haría bien con su dolor y algo de hielo para la inflamación, pasando casi toda la noche con verduras o pedazos de carnes congeladas sobre el rostro. Había dormido muy poco y se sentía algo cansado con todo lo sucedido en el día, casi no había dormido y su humor no era el mismo de siempre por la falta de sueño.

Tsukki esperaba en el lugar de siempre a Tadashi para poder irse juntos y grande fue su sorpresa al encontrarlo con la mejilla morada y su labio roto; rápidamente se acercó al más bajo para tomar su rostro con ambas manos —con cariño para no lastimar más al chico—, las preguntas estaban casi escritas en su cara y su preocupación se podía apreciar a leguas.

— ¿Qué te sucedió? — Tsukishima solo podía pensar en que nuevamente estaban molestando a su mejor amigo al punto de golpearlo o incluso había pensado que le habían robado.

Yamaguchi hizo un adorable puchero — Solo discutí con algunos chicos y no sé en qué momento llegamos a los golpes.

— ¿Los conoces? ¿Son de Karasuno? ¿Dónde los viste? — su voz se escuchaba bastante molesta hasta llegó a darle algo de miedo al pecoso.

Con cariño, Tadashi acerca sus manos hasta las mejillas del rubio para acariciarlas — No te preocupes, no son del instituto y no los conozco. Solo ocurrió por casualidad, nada más.