Un Ángel, ¿Enamorado? ~DREWLYNCH~ >TERMINADA<

#14.1- Revelaciones (Parte 1)

Drew McIntyre

Despierto y veo a mi preciosa irlandesa dormir a mi lado, lagrimeo triste, pues a la madrugada San Pedro me notificó que podría volver al paraíso y que podía usar mis poderes libremente. Tomé toda la ropa y las demás cosas que Matt me había comprado y la guardé teletransportandolas en su sótano, pues no sabía si volvería para usarlas de nuevo alguna vez. Todo estaba en silencio, hechizé a Becky para que siguiera dormida porque si despertaba no podría despedirme de ella, no lo soportaría. Termino besando su frente y le dejo una carta despidiendome de ella para siempre. Paso por el apartamento de Matt para despedirme y hacerle jurar que cuidaria a Becky en mi ausencia. Tomé una manzana de la frutera antes de salir y me la como al llegar al ático del edificio teletransportandome donde evité que Becky se matara y de paso la conocí por primera vez.

-Te extrañaré, planeta Tierra. Debo reconocer que me equivoqué contigo totalmente. Es hora de volver al Paraíso, mi hogar- abrí un portal mientras el  cielo neoyorquino comenzó a relampaguear y la crucé del otro lado e inmediatamente mis alas volvieron a aparecer en mi espalda. En eso veo que Dolph y San Pedro me esperan, me pregunto que querrán...

...

Omnisciente.

Después de que Drew cruzara el portal, Becky abre los ojos y encontrando una pequeña carta a su lado decide levantarse para leerla.

Becky

Te escribo esta carta -o intento de ella- porque si me despedía en persona no lo soportaría y se que tu tampoco. Cuando leas esto es porque ya volví al paraíso junto a Dios.

Estoy luchando internamente para no llorar mientras te escribo esto, créeme que cuesta demasiado. Gracias a ti descubrí sentimientos como la lealtad y la amistad y eso me llevó a quererte muchísimo.

Siempre aunque no te des cuenta voy a protegerte porque más allá de que hayas sido mi protegida y que todo fue una misión me sentiría miserable si te pasara algo.

Espero y seas feliz con Dean, mereces serlo luego de tanto que has sufrido. Cualquier cosa que necesites no olvides recurrir a Matt.

Si el Todopoderoso me lo permite iré a la Tierra a visitarte, pero si no, quiero que sepas que te quiero mucho y que te has ganado un lugar en mi corazón para siempre.

Tu ángel guardián favorito, Drew.

-Me quieres pero no me amas como yo te amo a ti Drew- Becky rompe en llanto- Eres un egoísta, preferiste abandonarme a admitir lo que realmente sentías por mi porque se muy en el fondo que también sentías lo mismo que yo. Pero juro que voy a olvidarte, con Dean o con quien sea, pero te olvidaré- se acuesta en la cama llorando del dolor.

Pasaron varios días y Becky no salía de su departamento, sólo abría la puerta para recibir a su novio Dean a quien le mintió diciendo que había enfermado, para hablar sobre la futura boda.

Evitaba a toda costa nombrar a aquel ex caído, pues lo odiaba por dejarla sola y no aceptar que sentía cosas por ella... Matt resignado a que su amigo no volvería sólo se dedicó a cuidar a la pelinaranja y cuidar a su familia, aunque no lo decía, comenzaba a tomar ciertas actitudes sospechosas de Dean, como su negativa a casarse en una iglesia sino en un bosque solitario.

El día llegó, Becky se encontraba totalmente deprimida y arreglandose pero no iba a fallarle a Dean, y el Diablo hipnotizó a unas cuántas personas para hacerlos pasar como "amigos cordialmente invitados" para no levantar sospechas sobre lo que iba a ocurrir ese día.

En el paraíso Dios esperaba a Drew para confesarle toda la verdad cuando se percata de la presencia de Dolph, Pedro y el recién llegado ángel escocés.

-Drew, te estaba esperando-

-Mi señor- el ángel hizo una reverencia en señal de respeto.

-Primero que nada quiero notificarte que no estás aquí porque has cumplido la misión que te encomende, de hecho, fracasaste en el, porque te terminaste enamorando de tu protegida- Drew baja la cabeza con culpa.

-Lo lamento mucho mi señor- el ángel comenzó a derramar algunas lagrimas-le fallé-

-Aunque todo eso estaba escrito- el Todopoderoso levanta la cabeza del ángel.-Todo ha sido parte de una profecia-

-¿Profecía?-

-Verás, Drew. Estaba escrito que un ser celestial y una humana estaban destinados a estar juntos y que de ese amor puro y natural nacería un ser que marcaría mi alianza con la Tierra de nuevo. Tu y Becky fueron los elegidos para que eso se cumpla-

-Algo similar a lo de María y José...- añade Drew

-Algo parecido pero a ese ser nada va a ocurrirle porque tu vas a protegerlo con tu vida pues a partir de este momento proclamo que serás un ángel pero al mismo tiempo un ser humano común y corriente mortal- Drew abre los ojos a más no poder- Conservarás tus poderes celestiales pero ya no serás inmortal porque desde ahora vas a vivir en la Tierra hasta el día de tu muerte.

En eso Dios abre un pasaje donde puede verse los acontecimientos ocurridos en la Tierra y Drew seguía anonadado con lo que el Señor le estaba diciendo mientras Dean se alistaba para la boda.

-El no es él, Drew. Es Luzbel dentro de su cuerpo y su misión es matar a Becky para que lo que acabo de decirte no se cumpla- Drew entró en alerta.

-No puedo permitir eso mi señor, tengo que regresar-

-Lo harás, pero antes debo darte un arma para acabar con el hechizo de Luzbel y vuelva donde pertenece y ya no les haga daño- en eso Dios le entrega al ángel una espada Claymore celestial- Debes clavarsela en el corazón para que su espíritu maligno se desprenda del cuerpo. Matt no dejará que Dean muera, es una víctima más de todo esto- en eso Drew se fija en Becky, vestida de novia que se miraba triste al espejo, como si nada ya tuviera sentido para ella.

-¿Te duele verla así?- pregunta el Señor

-Mucho mi señor-

-Necesito que te quites ese peso que llevas en el pecho, hijo. No tengas miedo de aceptarlo- Dios compasivo colocó su mano en el hombro del ángel, que comenzó a llorar de la culpa.

-La amo, mi señor, amo a Becky con toda mi alma, con todas mis fuerzas y con todo mi ser, desde el día que la salvé, tiene el alma más pura y buena que conozco, me enseñó tantas cosas de la Tierra... Y aunque la profecía no existiera o Cupido y Valentin yo igual la elegiría porque es el amor de mi vida, y lloro porque me siento culpable de su sufrimiento ahora mismo- lagrimea el ángel tan triste.

-Lo de ustedes es un amor puro y natural, surgió por si sólo y no merece ser destruido por un ser tan infame como Luzbel. Es por eso, hijo mío que te digo que es hora de que vuelvas a tu nuevo hogar y que salves a la mujer que amas-

-Voy a salvar a la mujer que amo y protegerla siempre, con mi vida- tomó la espada y la colocó en su hombro-

-Te bendigo, hijo. Puedes irte- en eso el ángel limpia sus lágrimas y tomando la espada con fuerza volando se dirige junto a Dolph y Pedro a la entrada del paraíso donde no pudo evitar recordar cuando Dios lo había expulsado para ir a la Tierra, hoy el volvería pero para quedarse y no sólo por la profecía, sino porque el mismo lo desea así.