Cuando Alastor nació, todos estaban muy felices, excepto por su padre. Su padre un cazador y su madre una prostituta, el padre de Alastor había intimado con ella demasiadas veces, la madre de Alastor estaba sumamente enamorada de el cazador, era apuesto, amable, caballeroso, la respetaba pero el hombre tenía algo que le resaltaba, su sonrisa y sus ojos de color carmín; la última vez que intimo con ella, no quiso tomar las pastillas anticonceptivas, amaba a ese hombre y haría lo que fuera necesario para quedarse con él, estaba completamente loca. Cuando el hombre se enteró, no tuvo más opción que aceptar, aunque no quisiera estar con ella, aunque tenía una vida por delante, aunque su vida se arruinaría en si, ¿Qué mas daba? lamentablemente tuvo que aceptar y estar literalmente amarrado a alguien que no quería, ya no importaba, el niño no tenía la culpa, intentaría quererlo y ser un buen padre por lo menos.
El padre de Alastor era el que más lo cuidaba, su madre tenía que hacer sus trabajos hasta que por lo menos tuviera el suficiente dinero para tener un hogar, alimentos, juguetes, ropa y finalmente para cosas que querían. Su madre se había tardado extremadamente 2 años en tener el dinero suficiente, pero su padre también trabajaba, ya tenían dinero que hasta les sobraba pues ellos querían que Alastor tuviera de todo, querían distraerlo de la realidad de sus padres, lo cual funcionaba.
Alastor tenía 4 años y se encontraba en su habitación, sus padres estaban gritando pero él solo le prestaba atención a sus juguetes, tenía dos favoritos en especial, un felino con alas y una ciclope pelirroja, le recordaban a dos amigos que tenía y que siempre jugaban con él en el jardín de niños.
Alastor era como su padre, siempre sonreía y tenía sus ojos carmín, también era educado; su madre lo quería mucho, a ella le encantaba como era su niño, cuando iba al colegio a dejarlo, las maestras decían lo mejor de Alastor, tenía buenas calificaciones y buen comportamiento, "Mi hijo es perfecto" pensaba ella.
Alastor tenía 5 años, se encontraba en clases, iba a ser hora del receso, su compañero que se sentaba al lado de el, había llegado tarde, otra vez y poco le importaba sinceramente, el problema era que este lo distraía, levanto la mano.
-Maestra: ¿Qué sucede Alastor?
-Alastor: Anthony me esta molestando, de nuevo.
La maestra frunció el ceño.
-Maestra: ¿¡Qué te he dicho Anthony!?
Anthony solo bajo la cabeza, quería tener amigos, se sentía muy aburrido en el receso y en clases, hablaba con Alastor ya que no tenía nada más que hacer, el receso finalmente comenzó y Alastor se le acercó.
-Alastor: ¿Puedo preguntarte algo, Anthony?
-Anthony: Puedes
-Alastor: ¿Porqué siempre conversas en clases conmigo?
-Anthony: Me aburren las clases, me aburre el receso, me aburre esta escuela, me aburren todos; no tengo a nadie para jugar aquí.
-Alastor: ¿Quieres ser mi amigo?
-Anthony: ¿Qué?
Alastor: ¿Qué si quieres ser mi amigo?
-Anthony: ¡¿Hablas en serio?!
Alastor asintió y se sentó a su lado, comenzaron a hablar de cualquier cosa hasta que entraron al salón otra vez, ahora tenía tres amigos. Finalmente su madre lo recogió y fueron a su hogar mientras le contaba lo sucedido, mañana sería otro día más entretenido.
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Amore
Fanfiction¿Cuánto siento por ti? -------------------------------------------------------------------------------------------------- Los personajes no me pertenecen, son de la querida creadora Vivziepop. Ninguna de las imágenes son mías, todas a su respectivo...