Jugada de la vida

Prólogo.

Caminé decidida a confesar lo que siento por él, lo amo desde que me contrató comó su secretaria hace ya tres años, hoy me enteré que le queda poco de vida, por una maldita enfermedad que se lo está comiendo, eso lo escuché en el baño, todos lo sabían menos yo.

Toqué la puerta y escuché un "adelante", caminé a paso firme a confesar mí loco amor, a mis 27 años sólo he tenido un novio y fue un asco al principio todo de color rosa pero luego fue una..., para nunca más tener uno. Al entrar lo veo sentado con la cabeza agachada escribiendo algo en su agenda, comó siempre, levanta la vista dejando su lapicera de lado y me hipnotiza con esa mirada azul cielo que tiene, su cabello negro revuelto, esos labios gruesos que te invitan a ser besados, su mandíbula cuadrada ,su nariz recta....

- Señorita Abigail estoy hablandole hace más de 10 minutos ¿ qué pasa...

- Jean Fox, callate de una vez, sólo vine a confesarte algo nada más - lo miré él tenía la ceja levantada nunca le habia llegado hablar de este modo desde que entre a trabajar con él, estaba totalmente serio llegué a retractarme lo que le iba a confesar pero ya estaba aquí ya había lanzado la piedra y no podia esconder la mano, ahora sólo tendría que seguir adelante con mí confesión.

- Entonces ¿qué es lo que usted quiere confesar? - Se levanta rodeando su escritorio yo retrocedí dos pasos sólo por instinto, él me pasaba por casi cinco centímetros, su estatura como siempre imponiendo miedo- ¿estas robando los archivos para la competencia y te pagan bien? - Yo abrí los ojos muy grandes intenté hablar pero él camino al sillón que tenía al lado de la ventana y se sentó apoyando el tobillo en la rodilla de su otra pierna, también apoyando el codo en el reposa brazo y colocando su cara en el puño de la mano derecha, mirándome muy fijo que llegue a sentir un escalofrío por mí columna vertebral esos ojos azules eran tan profundos - o sera...- siguió hablando con una sonrisa que se le formó, pero de repente se levantó y camino a mí sin esa sonrisa, si no con la mandíbula apretada y sus ojos brillaban de rabia, yo retrocedí con fuerza, pero choque con la puerta- ¿¡ tu eres la que daba la información a Gabriel Suárez!? - grito haciéndome saltar - ¡¡ no era Rosmerry, si no tu!! _ se pasó la mano por la cara - ¡¡¡lárgate maldita arpía de....

- ¡¡¡Cállate idiota!!! - él me miro raro

-¿Idiota? _ dijo incrédulo como asimilando mí palabra dicha

- Si eres un idiota - le golpie el pecho con mí dedo y luego lo aparte del frente con un empujón y levantando mis manos, estaba cabreada comó pudo llamarme asi nunca lo habia hecho siempre fue con respeto, caminé a la ventana y lo mire, Jean aún estaba viendo la puerta y apretando las manos en puños a su costado - comó mierda no te diste cuenta que llevó tres años amandote comó una idiota Jean Fox - lo vi girar rápido y mirarme atónito no movía ningún músculo de ese deseable cuerpo lo vi abrir la boca y cerrarla, pero no emitía sonido alguno - ¿vas a decir algo?

-No - dijo y camino a su escritorio yo me encogi de hombros aun que no me viera.

- Hasta luego señor Fox eso era todo lo que queria decir - dicho esto sali comó el alma que lleva el diablo, ya afuera empecé a temblar comó gelatina en un terremoto, camino a mi escritorio con mis piernas temblorosas me dejo caer a la silla apoyando mi cabeza dejando salir un gran suspiro para intentar tranquilizarme.

Salto al sentir una mano en mí cabeza, levantó la vista y veo a Luz Hunter frente a mi.

- ¿Que te sucede? - Me encogi de hombros

- Nada ¿por? - Dije dudativa, espero que no haya escuchado la pelea con mi jefe o mejor dicho los gritos, le miro la cara y veo su típica sonrisa de niña mala - ¿sucede algo?

- Le hemos gastado una broma al rey del hielo - arruge mí frente

- ¿Cuál?

- Todos pienzan que tiene una enfermedad terminal y que va a morir muy pronto y ¡¡¡no es más que una broma para el dia de los inocentes!! - Me levanté de golpé dejando caer la silla estruendosamente, mire a Luz con los ojos desorbitados, respirando agitadamente, la cabeza me iba a explotar - ¿niña que te sucede estas pálida?

- ¡¡¡ Que mierda hice por dios!!! - Gemi tapandome la cara con ambas manos...