¿𝐏𝐎𝐑 𝐐𝐔𝐄? • ᵏᵃʷᵃʰⁱᵐᵃ

𝑷𝒓𝒐𝒉𝒊𝒃𝒊𝒅𝒐 𝑫𝒆𝒔𝒆𝒐

¿Por qué no me siento culpable?

Tal vez sea porque aquí me siento viva.

¿Por qué me pierdo en el deseo al estar contigo?

Al sentir tus manos recorrer todo mi cuerpo, tus grandes manos, tersas, cálidas.

¿Por qué soy adicta a tus besos?

A esos besos llenos de lujuria, deseo, pasión. Que me hacen suspirar y maldecir al mismo aire.

¿Por qué me excitas tanto?

Con tu torso y músculos bien definidos. Con esa arrogancia tuya que me vuelve loca de una y mil formas. Con esos ojos tan transparentes que me reflejan y me miran con deseo.

¿Por qué me siento más viva contigo, Kawaki?

Si yo debería estar sintiéndome así con la persona que, supuestamente, se casará conmigo en cuestión de días.

No eres él. Él no es tú.

Tú no finjes sonrisas, tú no te haces el bueno.

¿Por qué todo esto tiene que ser tan prohibido?

Porque le ocultamos todo a todos...

Porque se vuelve más emocionante cuando estamos solos.

En aquella habitación poco iluminada.

Con nuestros cuerpos desnudos, moviéndose al mismo ritmo.

Gozando del placer de ser uno solo.

De sentir tu respiración agitada mientras tus labios contornean mi cuello y clavícula.

El placer de oír tus gemidos varoniles, gruesos, excitantes.

La forma en la que me besas, en la que me tocas, en la que enredas mi cabello entre tus dedos.

La forma en la que me haces es el amor es magnífica, congeniamos al instante de cruzar miradas.

¿Por qué no puedo gritarle al mundo que soy feliz haciendo esto?

Porque mi lengua se queda enredada con la tuya.

¿Por qué me miras de esa manera?

Sabes que no puedo resistirme a ti, a tu singularidad.

A esa sonrisa que no le muestras a las personas.

¿Por qué me tienes tan presa a ti?

Tan solo sentirte, me haces estremecer.

La calidez de tu cuerpo desnudo chocando con el mío, el calor emanando de nuestros cuerpos conforme hacemos tantas cosas.

Los suspiros profundos y placenteros, indicando que disfrutamos esto.