30 Dias De Otp (Kanento)

⚜Día 17⚜

¿Quién no estaría nervioso?, mi linda novia quería presentarme a su familia, para demostrar que lo mío con ella era lo suficientemente serio como para tener la confianza de hacerlo, yo que ya lo había hecho, a mis padres les había encantado ella, mi más pronto inconveniente era de lo poco que sabía de ellos, pero la información bastaba para asustarme, sólo un padre, dos hermanos viviendo con ellos, no podía ser, no podía tener tan mal suerte, todos eran hombres, iban a comerme vivo.

–No te dejes intimidar por papá, Kanon– Me decía ella mientras aún permanecía en el auto intentando tomar calma, respirar profundo y meditar lo que iba a decirle a la familia –Él no tiene por qué decirte nada–

–¿A qué te refieres?– Lo había notado antes, cuando hablaba de su padre lo hacía con una voz que aparentaba guardaba cierto enfado.

–Él...– Su ánimo decayó –Julian es muy hipócrita, va a decirme que no quiere que tenga novio cuando él se la pasa con un montón de mujeres– No me había hablado de eso antes –Yo entiendo que haya querido que tuviéramos mamá, pero... Eso ya era antes– No le pregunté más porque no quería verla triste, era obvio que había detalles que todavía no sabía –Mis hermanos estan fuera, me aseguré que no lleguen hasta tarde– ¿Qué habría hecho?, sin avisarme abrió la puerta y bajó del vehículo.

–Espera Tetthys...– Todavía no estaba listo, pero de cualquier forma la seguí.

Todo me temblaba, desde las piernas hasta las manos. Uso su llave para entrar y aunque me muriera de los nervios por dentro, traté de aparentar estar lo más tranquilo posible, ya había tenido malas experiencias con las familias de mis parejas, al parecer nadie me quiere, rezaba por que no fuera este el caso.

Era la primera vez que estaba en su casa, con un diseño simple, espaciosa y bien decorada, me maravillo y no pude evitar decir un cumplido al respecto, ella se sentía orgullosa diciéndome que fue su madre quien consiguió todo eso.

–¿Papá?– Lo llamó levantando la voz en la casa.

–Estoy arriba– Escuché la respuesta venir de una voz madura.

–¿Podrías venir?–

–En un momento, estoy trabajando– Ella suspiró.

–¿En que trabaja tu papá?– Me dio curiosidad.

–Es pintor, a veces pinta autos, otras veces casas, negocios y cuando está en casa hace cuadros y los vende– Debía ser bueno –Como sea, siempre dice que va a tardar un poco, pero no es cierto. Mejor toma asiento– Fuimos a la cocina –Va a tardarse un buen rato, ¿quieres algo de beber?–

–Oh no, pero gracias–

–Relájate, voy a poner agua para tomar un té– Estuvimos varios minutos sentados en la mesa, hasta que escuché pasos y vi al padre asomándose a la cocina.

Fue como odio al instante, bueno, exagero, pero no tenía otra forma para expresarlo, no le caí bien, tan sólo su hija le dijo que yo era su novio me rechazó.

Vaya suerte que tenía con los suegros. No lo dijo frente a mí, pero tenía a mi novia quejándose conmigo de las cosas que habló su padre de mí.

–Necesita conocerte más– Tenía una idea para que me hiciera amigo de su padre.

–No creo que eso sirva de algo– Era sincero, no tenía expectativa de entablar una relación ni siquiera pacífica.

–¿Cómo qué no?– No iba a hacerla desistir y lo supe, suspirando hacia mis adentros.

Lo sabía, pero nunca esperé que hiciera tal cosa, yo me imaginaba que me invitaría a más de sus eventos familiares y me haría pasar más tiempo con ellos, pero lo más importante, con ella, a mi lado, en pocas palabras, presente y no dejándome en la guerra sin fusil, porque me encerró en su casa con su padre y como si no fuera poco, bloqueó las salidas por fuera, ¡estaba loca!, ¿quién hace eso?