YUANFEN | único capitulo.

669 83 26
                                    












❝ QUE  SENTIDO  TIENE  SER  INMORTAL SI  NI  SIQUIERA PUEDO VIVIR LA  ETERNIDAD  A  TU  LADO  COMO  PROMETIMOS❞











El invierno había llegado, y con ello la nieve, una tormenta se aproximaba no muy lejos de donde se encontraban caminando, y Kakuzu pudo darse cuenta al instante de eso.

El viento soplo fuertemente, su capa que tenía el logo de Akatsuki se movió con el viento, su compañero que caminaba detrás suyo se abrazaba a si mismo para no congelarse, suspiró viendo como salía "humo" por el distinto aire de sus pulmones. Hacía demasiado frío.

El mayor miro hacía atrás de reojo mientras seguía caminando, observó como Hidan temblaba, su ceño estaba fruncido, parecía molesto por la baja temperatura. Kakuzu pensó un instante y enseguida creyó que era mejor parar a descansar en algún hotel cerca de la aldea, la cuál se encontraban más cerca de lo que había pensando, ya que sería mucho mejor que ir a una cueva a refugiarse, preferí mil veces eso que a morir de hipotermia. Aunque dudaba que morir en esa oración sea exacto a lo que pasaría.

—Hidan.— el nombrado abrió sus ojos para ver al mismo que lo llamaba. —Vamos a parar a un hotel cerca de aquí, hace mucho frío.— anunció con su tono grabé que usualmente tenía en su voz.

Hidan solo asintió con la cabeza mientras se encogía de hombros. Kakuzu volvió a mirar hacía el frente encontrandose con la entrada a la aldea.

Siguieron caminando por unos largos minutos, todo el camino en silenció, el mayor de los dos inmortales no sabía porqué, pero era extraño, Hidan no era de esas personas que se mantenía en silencio fácilmente; sonaría raro, pero por alguna razón no tuvo alguna razones para golpearlo en todo el trayecto, como siempre solía ser. No sabía si su compañero se mantenía en silencio por el frío o por alguna otra razón. Ese día en específico el menor se encontraban, o mejor dicho, se compraba como si estuviera desorientado, casi perdido.

Podría ser que Kakuzu se estaba preocupando por nada, pero eso no quitaba el hecho de que su amigo de verdad estaba raro.

Cuando al fin llegaron a un hotel, ambos entraron y buscaron una habitación para cada quién, fue entonces que los dos chicos se separaron para ir a sus respectivas habitaciones que les habían tocado.

Una vez adentro del cuarto, Kakuzu se saco aquella especie de sombrero que siempre llevaba puesto, dejó escapar un largo suspiro mientras se pasaba una mano por todo su rostro, se sentía exhausto mentalmente. Solo tenía a Hidan en la cabeza, y eso lo ponía bastante nervioso, quería pensar en otra cosa, pero solamente podía ver a su compañero de batalla en la cabeza. Maldijo en voz baja, se acercó a la cama, acto seguido, se dejo caer en ésta.

Miro el techo de su habitación un largo rato, sólo, pensando en todo lo que estaba pasando últimamente en su vida, y cuando se refería a eso, era que solo pensaba en Hidan, aquel chico peli plata que no salía de su mente. Quería dejar de pensar en él, pero sus actos lo confundían, lo había dicho muchas veces, pero seguía repitiendo lo mismo. Algo le pasaba a su compañero y no tenía cara para decirle. Su manera de hablar; sus acciones; su forma de referirse hacía él, todo había cambiando desde ya hace un par de meses, tres para ser exacto, desde su pelea en aquella caverna, algo había dado un giro en la vida de su compañero, incluída la suya por desgracia.

¿Pero qué más podía hacer?. Es decir, se estaba quejando de que su amigo ya no le gritaba al hablar, que ya no lo irritaba cuando iban a una misión, ya no lo molestaba cada vez que descansaban en algún lugar; justo como ahora. Su amigo ya no le insultaba cuando decía algo, y si lo hacía eran palabras justas y necesarias para que la conversación no durara demasiado.

Yuanfen ━━━ ❝KakuHidan❞ | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora