Escondite.

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Esto era inesperado, ¿Cómo pasó?¿Cómo llegaron a esto?¿Porque estaban encerradas en el casillero de la oficina del director? Les contaré desde el inicio.

Sua y Siyeon han sido rivales desde que iban en secundaria, siempre una iba en dirección opuesta a la otra, y hasta el día de hoy estando en preparatoria siguen siendo así.

Siyeon siendo la chica atlética, inteligente y guapa, además de graciosa, extrovertida y amable tenía algo más que ofrecer, y ese algo era notado por todas las chicas del instituto al verla jugar basquetbol en los horarios de deportes. Siyeon poseía un miembro masculino, una condición médica rara que nadie podía explicar pero así era, tenía un pene, uno que a palabras de muchos y de muchas era muy notable y difícil de esconder.

Siyeon tenía siempre una larga fila de admiradoras que deseaban estar entre sus manos, esperando por la atención de la atleta, "sus 30 mil novias" así era como llamaba a todas sus adoradoras sin embargo la única que no entraba en esa lista era SuA.

SuA era una chica guapa, lista, cariñosa y presidenta estudiantil del consejo, todos la respetaban y admiraban atrayendo la atención de muchos chicos del instituto quienes simplemente morían por estar con la reina del lugar, asi era como la llamaban, ya que todos hacian las cosas como ella quería, si ella quería orden ahí lo había, si ella quería silencio ahí estaría, era simplemente complacida y nadie desobedecia sus reglas a excepción de alguien, una sola persona, Siyeon quien no hacía caso de las palabras de la presidenta.

-¡Lee, te dije seriamente que no te quería ver jugando en los pasillos.-hablo la mayor quien llegó al lugar resonando sus botas de un tacón alto, mientras su uniforme escolar se mantenía impecable, con su falda de flecos y un saco azul que marcaba su figura.

Todos se hicieron a un lado dejando pasar a la presidenta quien se veía molesta, algo que no era una buena señal y por esa razón nadie se metía y preferiría observar.

Por otro lado Siyeon giraba a ver con fastidio tras oír el regaño de la mayor quien se aproximaba a ella; rodo los ojos y acomodo su cabello mientras veía a la más baja frente de ella mostrando una sonrisa burlona, algo que alegraba sus días era molestar a la reina de la escuela.

-porfavor Kim ahora no me molestes, tengo que practicar y no puedo dejar que algo me distraiga.-tomo el balón de basket entre sus manos comenzando a jugar con este, todos miraban atentos la "batalla" que surgía en el pasillo.

Al contrario de SuA, Siyeon vestía del uniforme de deportes un pantalón de algodón azul con rayas blancas que hacía juego con la sudadera y una común blusa de deportes blanca, que tenía el mismo color de sus tenis, el cabello de Siyeon se encontraba atado en una coleta lo que hacía ver mejor aún el perfil de esta.

-me importa poco si tienes que ir a la NBA Lee, ahora deja ese balón y vuelve a tu clase.-la castaña estaba cruzada de brazos observando fijamente a la más alta quien la desafiaba con la mirada, detestaba de ver la sonrisa de Siyeon, sobretodo porque para sus pensamientos se le hacía una sonrisa muy linda y bella que encajaba bien y hacia resaltar su rostro.

-pff, claro Kim, lo haré el día que llueva conejos del cielo ¿Te parece?-sin ganas de seguir discutiendo se dió la vuelta y se fue por su camino, sonrió al escuchar una queja de la boca de su rival, SuA era una ternura y más cuando se molestaba, o almenos así lo veía la pelinegra.

Ese mismo día Yoohyeon, la mejor amiga de Siyeon le pidió un favor, parecía ser que habían descubierto a Yoohyeon con su teléfono en clase y no tenerlo durante tres semanas era una tortura más que un castigo así que le pidió de favor a la alta que si podía ayudarla a sacarlo de la dirección, ahí era donde guardaban todo asi que solo necesitaba la ayuda de alguien fuerte y atlética que la ayudara.

Suayeon One shots (G!P) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora