"Y vivieron felices por siempre. Fin"
Todos los cuentos terminan bien, menos para la princesa Freya y el príncipe Thomas. El hada madrina Edaleen se embriagó en la boda y lanzó por accidente un rayo al príncipe. Ahora solo quedaba huir.
Pero en su c...
Durante más de medio día Tristan y Eda se hallaban retenidos en el despacho de la directora Rocket.
La actitud de Eda era de un bochorno mezclado con enojo y la de Tristan era más bien, una desafiante y cansada. Rocket los mantenía bajo vigilancia mientras que Sylph hacía los mandados. Entre pregunta y pregunta que generaba la directora, la pericia preliminar no arrojó sino mas dudas y desconcierto sobre cómo fue que ambos terminaron en tal situación.
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No había respuesta a cómo fue que un mero personaje pudo detectar la varita siendo que estaba bloqueada, ni como fue que este no murió una vez el fragmento ingresó a su cuerpo. Tampoco el cómo fue capaz de interactuar con un hada sin permiso. Más y más dudas crecían sin fin pero Rocket decidió por finiquitar al asunto para dar el siguiente paso sin ser descubiertos.
La prohibición de traer forasteros de los cuentos a este plano era absoluta. Si bien Rocket los amenazó con delatarlos con Pryor, su intención era solo crear miedo en ellos puesto que si decía algo, su cabeza también rodaría por ser la directora de recursos humanos del área de Sylph y ser cómplice al no denunciar el asunto en primera instancia.
Tenía curiosidad sobre el forastero y su nuevo poder, entonces se le ocurrió una idea entre estúpida y arriesgada para dejarlo en este mundo: Lo convertiría en un pasante que estaría a cargo de vigilar a Eda en cada misión para evitar que cometiera errores, ya que su fama como Hada de la mala suerte, era muy extendida en todo el edificio y nadie en su sano juicio quería involucrarse con ella.
Bajó de categoría a Eda, a la de parejas y a Tristan le cambiaría el nombre para no levantar sospechas sobre su identidad el día de Auditorías con ayuda de sus parientes en el tribunal. Ya nadie dudaría de él y así siempre estaría junto a su hada.
-Por último, ambos firmen aquí. Muchacho deberás colocar tu nuevo nombre y apellido aqui para finalizar la contratación. Espero que sea uno bueno- Rocket señalaba los papeles con su dedo
-O sea puedo llamarme como yo quiera? Eso es increíble! Ya sé que nombre quiero, como me llamaba mi madre-
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-Eres estúpido, la directora dejó claro que no puedes usar tu nombre real puesto que en la Auditoría nos van a cachar- Eda estaba furiosa
-Para tu informacion, solo mi madre me llamaba con el nombre que usaré, ni siquiera los malnacidos que me abandonaron me decían así- en tono burlón contestó a Eda
