Pesadillas - One-Shot, RoyJay

One-Shot (Capítulo único).

El azabache se despierta asustado, tembloroso en su cama, se encuentra con Roy, hace ya algún tiempo que está viviendo en un departamento con él cerca de los barrios bajos de Gotham.

Su corazón late escandalosamente, tanto así que parece querer salirse de su pecho, él sabía lo que ocurría, esto ya había ocurrido muchas veces desde que resucitó, una serie de eventos vividos se presentaban en sus sueños, algunos más traumáticos que otros. Siempre que ocurría esto, el oji-verde salía a patrullar, algunas veces nisiquiera podía salir de su cama, pero esta noche había sido diferente.

Si bien sus sueños de por si lo atormentaban, siempre eran escenarios después de haber resucitado, mas este fue totalmente distinto, soñó con su muerte... Eso explicaba el estado en el que se encontraba, sudado y apunto de tener un ataque.

Intentó retener las lágrimas que amenazaban en salir, pero no pudo, quiso salir de la cama para ir al baño a tranquilizarse, pero no logró levantarse, se sentía paralizado.

Roy sintió como algo se movía al lado suyo, si bien fue leve, el ser un héroe, posteriormente un anti-héroe y un mercenario había servido para agudizar sus sentidos, por lo que abrió los ojos.

El ex-Robin al sentir esto, se quedó totalmente estático, pero ya era demasiado tarde, el pelirrojo ya lo había visto.

- ¿Jay? ¿Qué sucede? - Preguntó aún somnoliento el arquero.

- N-Nada Roy, v-vuelve a dormir - Dijo Jason tratando de sonar como siempre, pero fallando estrepitosamente al hablar con la voz temblorosa, y levemente entrecortada.

Mas el otro oji-verde al instante captó el tono de voz de Jason. Aunque también se sorprendió un poco, sin importar que ya lo haya escuchado así, seguía siendo un poco extraño y ni aún así estuvo preparado cuando el Wayne le miró.

- ¿Jay, qué pasa mi amor? - Volvió a preguntar Roy con preocupación mientras se acercaba hasta Jason.

El petirrojo se sorprendió un poco y se tensó.

- Roy... Sé que tiene que sonar muy estúpido, pero, p-pero... Yo, soñé c-con ese día, ese maldito día...- Dijo el pelinegro casi rompiendo en llanto, no le era fácil hablar sobre eso, ni ahora ni nunca.

Si bien no especificó que día, el arquero sabía muy bien a que se refería y tan solo saberlo le partió el alma en trozitos. El más alto se acercó a arruyar al de menor estatura, y si bien en otras circunstancias se abría resistido, esta vez no tenía las fuerzas para hacerlo, así que solo se limitó a corresponder el abrazo, pasando sus mano por los hombros del pelirrojo y escondiendo su cara en su cuello, Harper al notar esto solo se limitó a acariciar su pelo y su espalda en un intento de tranquilizarlo.

Todd comenzó a embriagarse por el olor de su novio, relajándose con las caricias que este le brindaba.

- Hey, mi amor, ¿Quieres hablar de ello? - Indagó Roy con cautela.

Jason nunca quiere hablar sobre eso, aunque Harper sea su novio, siente que nunca va a poder hablar o desahogarse hacerca de ese tema, por lo que, solo se limitó a quedarse unos segundos en silencio, hasta que se animó a responder:

- Siento que siempre me atormentaran esta clase de recuerdos, pero si es contigo, estoy seguro de que podré afrontar estos problemas. - Respondió con sinceridad el menor, regalándole un pequeña sonrisa temblorosa.

El pelirrojo lo miró con orgullo y ternura, acomodándose para acurrucarse.

Y en ese momento, los dos se quedaron dormidos, abrazados, y juntos lo más posible.

¡Hola! Este es mi primera historia, espero que lo hayan disfrutado, lamento que sea tan poco, pero son las 3:30 de la madrugada en mi país, y me apetecía escribir una pequeña historia, pueden corregir faltas de ortografía y votar si gustan, en los personal me encanta esta pareja y más si Jason es bottom.

¡Gracias por leer!

- Atte. Peppermint.