¿En Que Lugar Me Perdí? || [𝑾𝒊𝒈𝒆𝒕𝒕𝒂]

2.- Dueles

"Nuestra luz era celestial [...] Quisiera evitar haberme permitido amarte..."

El sol de la mañana se filtraba por las hojas del gran árbol, el dolor de cabeza gracias a la pésima noche anterior se intensifico gracias a la luz, realmente odiaba que todas sus noches de otoño sean iguales... Llenas de recuerdos dolorosos...

Se levanto muy a su pesar y suspiro con pesadez para caminar hacia la salida de su habitación para dirigirse a la cocina en busca de alguna pastilla para calmar el dolor de cabeza, el silencio reinaba en toda la casa... ¿Desde cuando estaba tan solo...?

Soltó un pequeño bufido para seguido sacar una pastilla y tomársela con un poco de agua, la idea de tomar mas de la cuenta para poner en riesgo su vida vino rápidamente al quedarse mirando el pequeño frasco de estas, cerró los ojos suspirando para seguido caminar en dirección contraria a su tentación para sentarse en le cómodo sofá color verde.

Se dejó caer sobre este cubriendo sus ojos con su brazo ¿a alguien del pueblo le importaba o solo era un simple estorbo para todos los guerreros y aldeanos?

Dispuesto a hundirse en aquellos pensamientos se quedó en aquella posición hasta que el timbre de casa lo hizo suspirar. ¿Valía la pena levantarse para ver quien osaba molestarlo? 

Asumía que seria algún pueblerino en busca de ayuda en su jardín o algo por lo que no hizo ni el mínimo intento por ir a abrir la puerta a pesar de que la persona al otro lado era demasiado insistente. 

–¡Willy abre ratón!

Esa voz tan fácil de reconocer Fargan llegaba para molestar como todos los días... Se levantó muy a su pesar para ir a abrir la puerta alejándose de ahí casi al instante para regresar a su lugar en el sillón.

Fargan empujó la puerta confundido cerrando detrás de él siguiendo al peliblanco unos pasos por detrás.

–Te vez hecho una mierda... ¿Resaca? Uhm... No, apenas estamos martes... ¿Otra pelea con Rubius? ¿Acaso ese oso mugriento hizo algo?

–¡¿Quieres cerrar la puta boca?! – Masculló lo suficientemente alto como para que el hibrido escuchara.

–Uy... Alguien no follo anoche... – Comentó divertido sentándose en el sillón dejando un espacio de distancia, sintió la pesada mirada de Guillermo sobre el a lo que río negando. – Ya paro... ¿Por qué tan de malas hoy?

–Nada importante Farg-

–Es importante si te pone así de malas...

–No es nada que te interesa, ahora dime a que cojones vienes si no largo de mi casa.

–Uy, lo siento... Perdón por querer ser buen amigo

–Vete a la mierda Fargan, ahora por qué no vas a follar con Alexby o con el primero que te encuentres

El mayor rodó los ojos con molestia. – Creí que estarías de humor para ir a dejarles un regalito a Auron y Luzu pero ya puedo saber que no...

Suspiró con pesadez y asintió con la cabeza. – Espérame en la base, llego en un par de minutos...

–No tardes mucho o regresare y te preguntare por el resto de la tarde que ocurre . – le dio una sonrisa tierna y se levanto para salir del árbol. 

Willy cerró los ojos al escuchar la puerta cerrarse y presionó el puente de su nariz intentando relajarse, Fargan no se tenía la culpa de ello pero era inevitable no sentirse una mierda durante esa época del año. Se levantó muy a su pesar dejando todo mal humor en el sillón, se acerco a su el ascensor y subió hasta llegar a su zona de encantamientos, continuo su camino hacia aquella rama, espero a que el lector de retina y una vez abierta entro para buscar su traje, hizo el mismo recorrido, tomo su mochila que descansaba cerca de la puerta principal sacando la red de su chocobo, salió de casa liberando al ave y emprender vuelo hasta la base en forma de calavera.

Durante el trayecto no dejaba de pensar en pequeños recuerdos de sus primeros años en Karmaland, donde realmente era feliz y no tenia ninguna preocupación mas que disfrutar cada hora del día en compañía de sus amigos y pareja.

Al llegar Fargan lo esperaba paciente sentado a las afueras de esta, se bajó de su chocobo guardándolo en su red. 

–¿Tienes todo listo? – el peliblanco pregunto con un tono de voz mas apacible que antes.

El mayor asintió con la cabeza mirándolo, abrió su mochila dándole la mitad de todo lo que había tomado de los cofres.

–Gracias... Luzu, Auron y triple siete, ese es el plan... 

–Rubius se va a eno-

–Me importa una mierda ese bastardo, ya dije que haremos.

–Bien... Déjame ir por mas minas entonces  

El peliblanco asintió sacando de nuevo a su chocobo para darle darle algo de comer antes de partir de regreso. Debían ser cuidadosos pues al ser de día había mas posibilidades de ser vistos.

–Podemos irnos... – EL castaño sacó a su ave para subirse a ella  y comenzar con su viaje de regreso al pueblo.

Willy chaqueo la lengua subiéndose a su chocobo para seguir a Fargan unos metros detrás. Sus pensamientos aun estaban revueltos, se sentía un jodido estorbo para todos, pero había prometido no ser el Willy débil que solo pocas personas conocía, al menos no con con sus nuevos amigos, al ver el pueblo decidió concentrarse en lo que harían. 

Fácilmente entraron por los aires en la muralla de Luzu dejándole un pequeño regalo justo en la entrada de casa, salieron antes de ser vistos para visitar la entrada del consultorio dejando una mina a unos metros de distancia.

Su ultima parada, el jardín inferior de Vegetta, volaron hasta ahí ocultándose entre los árboles. 

–Quédate aquí, yo me encargo de esto...

–¿Seguro? – Preguntó el de la mascara blanca. – Willy... Te noto extraño... ¿Peleaste con Vegetta?

Subió la mascara tan solo para mirar a Fargan sin una sola expresión. –No, solo quiero hacerlo... – ocultó de nueva cuenta su rostro y sacó las minas junto a su control remoto. 

Tendió su mochila hacia el mayor quien la recibió sin queja alguna mirando como el ojiverde comenzaba a caminar solo hacia ahí.

"Ahora tu recuerdo me hace sombra al corazón..."

Abrió las puertas de madera con lentitud, con la cabeza en alto comenzó a subir las escaleras con lentitud.

Recuerdos... Cuando eran felices... Cuando era feliz...

"Te fuiste nada mas, quisiste renunciar quererme..."

La ambición del ojimorado había arruinado todo... ¿Por qué tenia que ser tan terco?

A cada paso que daba el dolor en su pecho aumentaba, el otoño lo dejaba aun mas sensible...

"Pero me rompiste en dos y no encuentro reparación"

Dejó una mina en las escaleras, vinculándola a su control remoto para bajar con la misma lentitud. Poco le importaba si el duelo de aquella isla lo veía, quería, necesitaba sentirse libre... 

Dejó otra a los pies de las gigantes escaleras.

"Quisiera evitar haberme permitido amarte para perderte..."

Repitió el mismo proceso en las dos escaleras restantes, sonrió con altanería a pesar de no ser visto por nadie, sus ojos achinados se llenaron de lagrimas dejándolas salir con total libertad.

"Como dueles..."

Regresó sus pasos hacia la entrada dejando un par mas ahí. Se alejó regresando a donde hacia dejado a Fargan.

–¡¿Por que tardaste demasiado?! – El mayor se quejó con bastante molestia. 

–Las primeras no se vinculaban – Mintió enseñando el control. – Hora de irnos... 

Ambos prepararon a sus chocobos para salir lo mas rápido de ahí, subieron a sus aves y Willy activo las minas relajando el cuerpo emprendiendo vuelo con su amaba ave verde...