Un dorama de bomberos | Multishiping

XXXVIII

Frank se levantó de un salto, mucho antes que su alarma. Mando un mensaje a Luzu de que lo vería en el parque para dar unas vueltas. Fue directamente a su baño para cambiarse de ropa y cepillar sus dientes. Analizó que tan visible era su barba y aprovechó para rasurarse, pensando en lo guapote que se iba a ver en cámara.

Después de colocarse la ropa deportiva fue a la cocina, cuando abrió la alacena para buscar algo de desayunar, ignoro las frituras y galletas. Se fue directo a un bote de proteína. La odiaba, nunca se hizo más de un vaso, pero hoy se levantó con energía y ganas de hacer algo diferente. Se preparó la bebida y tomó unas barritas de granola para el camino.

Salió de casa con su playlist favorita y desde ahí se fue trotando, con la esperanza de encontrarse con Luzu en el parque. Cuando llegó ahí recibió el mensaje de que no podría llegar porque se quedaría arreglando cosas del patio. Supuso que la fiesta siguió. Vale que tienen aguante.

=======================================

Alexby, milagrosamente, también despertó temprano. Debido a un dulce olor y ruidos de fondo, se levantó con los cascos enredados alrededor de su cuello. Habían funcionado excelente evitando cualquier ruido asqueroso. Se los quitó de encima y se colocó las pantuflas.

Reviso rápidamente sus notificaciones, habían colgado algunas de las fotos que se tomó la noche y por suerte no había ninguna sola de cuando "su guardaespaldas" se los llevó. Aunque si había gente mencionando el hecho, pero muchos escépticos de que algo así hubiera pasado.

Su momento se interrumpió por risas y voces distorsionadas por la distancia ¿Fargan ya estaba despierto? Willy seguramente sí, porque estudia, pero el búho no se levanta por nada antes de las 11.

Primero solo asomó su cabeza para asegurarse de que eran ruidos de voces y no otra clase de sonidos de placer. Ahí se dio cuenta de lo delicioso que olía, era comida. Se dejó ir, quería saber que era.

La segunda sorpresa, era que no eran "voces" las que escuchó antes. Era música, eso era el ruido. Se acercó por el pasillo hacia la cocina. Al ritmo de September. Caminó con ritmo hasta entrar a la habitación.

Willy estaba ahí, también moviéndose rítmicamente de lado a lado mientras esperaba que el panqueque en la sartén estuviera listo de ese lado. Ignorante de que Alexby había entrado, golpeó con su mano el mango de la sartén; volteando el panqueque con éxito.

- ¡Eso!

- ¡Tío, pero que loco estuvo eso! ¡Tío! ¿¡Cómo lo hiciste!? ¿Cómo aprendiste a hacer eso? Que locura, vuelve a hacerlo.

- ¡Alexby! -Willy se para recto y deja de bailar- Disculpa, debió despertarte la música. Alexa, baja el volumen. Por favor -Se limpia las manos con el mandil, pretendiendo que nada estaba pasando.

- No, no me despertó eso. Fue el delicioso olor, me dio hambre. Anoche no alcance a cenar nada.

- ¡Buenos días, Alesbi! Justamente iba a despertarte -Sonríe el castaño al salir de la alacena con un par de cosas para adornar los panqueques.

- Tú también estás despierto - Toma asiento en una de las sillas altas del desayunador.

- Claro quién iba a decorar los panqueques si no soy yo? -Deja las canastillas de frutos, la crema batida, la crema de avellanas, las chispas de chocolate, la crema de malvavisco untable, miel y jarabe de maple. Alex siente que le dio un coma por azúcar con solo ver todo lo que sacó.

- Que no solo te falto helado.

- ¡Es verdad! ¿Willy tenemos helado?

- ¡No, Fargan! Basta. No. Deja de sacar cosas, creo que cada quien deberíamos prepararnos nuestro propio desayuno -Aparta todo el dulce hacia a un lado.