No me Juzgues, Ponte en mi lugar

Capítulo 28

Con los primeros rayos de sol y ese exquisito olor a café Dymas comienza lentamente a despertarse, sin duda tiene  un dolor fuerte de cabeza.
Esa chica morena anónima le ha llevado en una bandeja el desayuno, él con su cabeza todavía dándole vueltas se incorpora en el cabecero de la cama pasándose sus manos por su cabeza una y otra vez para asimilar el error ha cometido ahora.

-—Buenos días guapetón, pensaba que no querías comer, estas tan mono cuando duermes.-—Dice esa chica con una sonrisa al mismo tiempo que lo mira con afecto.

-—Buenos días-—, bosteza, se estira marcando aún mas sus músculos, agarra la bandeja come algo, dirigiéndose a ella hablándole en tono serio y frío le recuerda que solo ha sido un rollo pasajero por lo cual no quiere saber nada de ella, lo que pasó solo fue un error.

—Vaya como te pones, sinceramente me gustas mucho. Aun no sé tu nombre— Se dirige esa desconocida él.

—Dymas, mi nombre es Dymas, mucho gusto.

—-Yo Valerie, mucho gusto, y tranquilo por mi parte no me hecho ilusiones solo que estoy casada y mi marido me tiene harta de que me sea infiel . Mas bien quería probar que se siente cuando engañas a otra persona, como te vi así aproveché..no se.. eres muy hermoso Dymas.

-—Gracias Valerie, tu también lo eres, siento mucho que hayamos tenido que llegar así. Yo no quería aprovecharme de ti, no sé que decir estaba tan deprimido.

-—Desde luego no hace falta que lo jures, por que no parabas de decir te quiero Denisa.

-—¿Cómo?, ¿qué estas diciendo?

-—Pues eso, que no dejabas de pronunciar a tu novia supongo.

—-No, realidad mi novia se llama...

—-Adara, lo sé, trabajé con ella en una sesión de fotos para la portada de la revista Glosset.

-Joder, que marrón ¿no? ¿Osea qué me conocías?

— Más o menos. Pero tranquilo, como te he dicho mi marido me es infiel, se acuesta con toda la que se le ofrece, y ya estaba cansada quería saber que se siente cuando eres una adúltera y te debo una.

-— ¿A mí, por qué?

-—Por hacerme sentir una mujer deseada y querida, me dio un poco coraje cuando pronunciabas el nombre de Denisa, supongo que esa chica esta metida muy adentro en tu mente.

-—Y de mi corazón, Valerie, ella es el amor de mi vida, te echarás a reír pero...la amo como un loco y sin embargo no la hecho mía aún, solo he probado un par de veces la miel de sus besos.

—-No lo puedo creer Dymas, pero...

-—Por que diríamos que acabo cagandola siempre, quiero conseguir que cambie, que sus defectos sean afectos y todo en ella sea pureza, bondad..pero es todo lo contrario, solo mira por sus intereses, por ella misma, es muy caprichosa, engreída , pero es muy hermosa y tiene algo que hace que cuando esté cerca de ella sea otra persona, me siento especial a su lado, me siento como un héroe, pero no sé como lo hago que acabo lastimándola y peleándonos.

—-Vaya, vaya, que bonita historia de amor, pero Dymas tienes que hablar con ella si eso te molesta de su personalidad házselo saber, si no nos dicen nuestros defectos siempre continuamos haciendo lo mismo.

—-Ya, pero no es fácil. Cada vez que le digo algo, se pone a la defensiva queriendo llevar la razón y no siempre se lleva.

-—Porque defendemos nuestras ideas y cuesta mucho reconocer nuestros errores Dymas. A mi también me pasa con mi marido cuando nos peleamos, nos echamos las cosas por cara pero ninguno admitimos nuestros errores, solo que luchamos por quien lleva razón y porque tu me haces, me dices...sin darnos cuenta que nos estamos  lastimando mucho.