10.

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—Kushina-san... lo lamento.—Hablo ______ tras haber atraído al Kyuubi a Konoha aún teniendo a Naruto en sus manos.—Debo de colocar una barra para que no pueda lastimar a nadie de Konoha.

—¡Yo todavía puedo pelear, _____!.—Le he mencionado al verla tan cansada y sin tener demasiada fuerzas como para hacer la barrera, he utilizado la técnica del clan Uzumaki con el poco chakra que me quedaba y así ayudar a mi esposa.—Estoy muy agradecida por todo lo que has hecho.

—Kushina-san...

—_____... no pongas esa cara.—Le he pedido mientras que formaba una sonrisa en mi rostro.—Estoy feliz... porque fui amada por ti... Si tuviera que imaginar un futuro en el que voy a sobrevivir y nosotras vivimos juntas con nuestro hijo... solo puedo imaginar lo perfecto que sería...

—No. No permitiré que usted muera, Kushina-san.—Dijo secando la lágrima que antes había soltado tras escuchar mis palabras.

—Pero...

—Escuche. Tal vez lo que le diga la haga enojar pero es la última opción que nos queda por salvar a konoha.—Me aviso _____ mirando a nuestro bebé y verme de nuevo.—Voy a sellar la mitad del Kyuubi adentro de Naruto y la otra mitad en mi, junto con el chakra que nos queda.

—Es nuestro hijo... ¡Yo no quiero que Naruto tenga esa carga!.—Le he dicho al sentir un gran dolor en mi pecho por lo que planeaba.—¿Porque lo haremos? ¿Por el país? ¿Por el pueblo?.

—Nosotras somos una familia de ninjas.—Inicio hablar.—Y como ninjas nuestro deber es proteger a nuestros hijos y familia aunque sea arriesgando nuestras vidas.

Sin que me dejase hablar mire como _____ comenzaba a realizar los sellos del Shinigami para así dar parte de su Chakra y al ver esa escena me fue inevitable soltar unas cuantas lágrimas al ver cómo mi amada se sacrificaba por mi como también para nuestro hijo.

—Lo siento Kushina-san.—Me hablo ____.—Se que prometí que finalmente podremos estar juntas, pero creo que no podré cumplir esa promesa.—Ella miró a Naruto.—Es nuestro hijo...

—Nuestro hijo…—Repeti sus palabras.—¡Por eso no quiero que pase por algo difícil!.—La mire.— ¡No tienes que morir!.—Volvi a mirar a nuestro querido bebé.—¡Quiero que te quedes con Naruto para que lo veas crecer y lo protejas!.

—Por el bien de todos y el nuestro...—Ella me miró seriamente.—Y por el buen de nuestro hijo.

—______...

—Y aunque pudiera vivir... no sería nadie sin ti, Kushina-san.—Confeso inclinándose a mi altura y depositar nuestro último beso lleno de amor y ternura mientras que acariciaba mi cabello.

Ella se separó limpiando algunas de mis lágrimas y ver a nuestro hijo.

—Es mejor que te quedes con Naruto, Kushina-san.—Ella me miró con amor mientras que otra vez una lágrima deslizaba por si mejilla.—Y aunque no me vean.. yo siempre estaré con ustedes.

Antes que yo dijera algo hemos mirado rápidamente al Kyuubi el cual intento dañar a nuestro bebé, pero antes que lo pudiera hacer _____ y yo impedimos que el zorro dañará a Naruto haciendo que nos atravesará una de sus grandes y largas uñas.

Pero lo afortunado fue que Naruto se encontraba asalvo.

—Gracias Kushina-san.—Oi decir _____ antes de haber hecho el sellado en Naruto.—Ya está todo listo, pasará algo de tiempo para que podamos verlo.

—Naruto...—Susurre su nombre aguantando el dolor que nos causaba el Kyuubi.—No seas exigente, come mucho y crece fuerte. No necesitas muchos amigos solo en lo que realmente puedas confiar. Se que es repentino todo esto.. pero quiero que te cuides y que continúes aún no estando nosotras contigo... realmente me hubiese gustado verte crecer junto con tu otra madre... pero creo que destino nos puso en otro camino.—Solte lágrimas por cada palabra que decía.—Mi hermoso bebé... te amo, te amor tanto y espero que puedas convertirte en un gran ninjas como tus mamás y sonrías con alegría. Lo siento mucho... espero que puedas perdonarnos.

—Quiero decir algo.—Me aviso _____ y ante eso he asentido.—Naruto, al igual que tú madre yo también te amo y hacemos esto porque te amamos y queremos que continúes la gran vida que te viene más adelante.—Escuche como la voz de mi esposa se quebraba más y más.—No comas tanto ramen todos los días y si lo haces mínimo saborealo, siempre estaremos contigo aunque no nos veas.—Senti como _____ depositaba un peso en mi cabeza y por ello he sonreído.—Kushina-san durante todo el tiempo que estuvimos justas lo he disfrutado, cada minuto y segundo. No quiero que mueras conmigo pero... creo que es por el bien de la aldea...

—Naruto, te amamos y siempre lo haremos.—Dijimos ella y yo al mismo tiempo.

—Sello de ocho tigramas.

Así fue como _____ y yo abandonamos este mundo dejando al Kyuubi dentro de nuestro hijo, se que es una decisión inrresponsable pero se muy bien que podrías manejarlo.

Adiós Naruto.

FINALLY WE CAN REST TOGHER |Kushina Uzumaki.| ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora