El profesor de la Universidad de Springfield, Massachusetts, James Naismith, en 1891, ideo un deporte que se pudiera jugar bajo techo, pues los inviernos en esa zona dificultaban la realización de actividad alguna al aire libre.
James Naismith analizó las actividades deportivas que se realizaban en la época, cuya característica predominante era la fuerza o el contacto físico, y pensó en algo suficientemente activo, que requiriese más destreza que fuerza y que no tuviese mucho contacto físico.