La oscuridad vacilaba por cada rincón, llegaba sola cuando se cerraban las puertas, ni una ventana presente, solo cuatro paredes y una cama; lo sentía como un nido de paz, la tranquilidad y el silencio podrían ser abrumadores en momentos desesperantes, pero siempre que podía aprovechaba su satisfacción; más una soledad comoda y abrazadora, era lo que sentía cada vez que se enterraba debajo de su almohada, el posible ruido se lograba captar a lo lejos y las voces se disfrazaban con la cálida respiración que se le formaba; parecía como un sueño con todos sus sentidos en función, era digno de apreciar, aunque a veces se aprecia de más.
Arropado entre tantas cobijas, su mente abría paso a pensamientos impuros sobre su frágil vida, así fue que comenzó el violento cambio en su rutina.
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El dormía 12 horas, siempre parecía cansado, tenía ojeras y se preocupaba muy poco por su higiene personal. Despertaba a las 13:00 p.m, comía cualquier cosa y hacia sus responsabilidades, pensaba que una vida más etérea no le podría a ver tocado.
Su cuarto bien podría ser un chiquero, pero sólo lo utilizaba para dormir, no necesitaba limpiarlo.Todo ocurrió demasiado rápido, pensando que tan solo hace unos días era un Niño de 8 años. Su vida no era complicada, pero a veces podría ser cuestionable el hecho de que siga viviendo, el por qué.
Su familia era única, sus padres se amaban apesar de los problemas, daban la atención necesaria y el dinero nunca hacía falta, con sus hermanos era lo mismo, claro que las peleas de por medio no faltaban al igual que las equivocaciones, y siendo el menor aprendía más y se fijaba en los detalles a su favor.
Su vida social era tan escasa que tenía peluches a mares solo para calmar la anciedad, cada uno tenía su nombre y lugar, contaba maximo con 3 amigos... Las otras personas solo se hacían llamar conocidos, a veces ni si quiera eso, pero al momento de intentar socializar pasaba algo, tan ridiculo y humillante que prefería quedarse solo... Lo intento una vez, no hubieron más.Su mala alimentación y cuidado, una cosa más a la lista, de su estrujada vida; algo que no podía cambiar por sí mismo, otra vez, el autocontrol no existía, pero a la hora de sufrir las consecuencias no tenía otra opción, solo llorar y tomar pastillas; el egoísmo y la negatividad, eran lo principal en aquellas acciones.
Todo eso y más, era el, no importaban cuantas pláticas abría tenido, ni los medicamentos, no cambiabaLos días pasaban volando, al igual que su tiempo, el cual desperdiciaba escuchando música y balanceándose en una hamaca, era una sensación muy placentera, no necesitaba drogarse para relajarse, tampoco pensó en hacerlo, sus viajes se daban de cabeza mientras iba de atras hacia delante con los audífonos puestos, tampoco había nada interesante mientras el sol posaba sus respectivas horas, pero al momento de apagar la luz todo se transformaba de manera sublime, puesto que las cosas propiciadas antes de dormir acomodaba su futuro y lo hacia atraer buenas o malas vibras.
Aquello se denominaba como una vida normal, más sin embargo no lo era; las personas y en general lo que lo rodea se denominaba como "normal", el no, era todo lo contrario, sus pensamientos negativos y sus posibles trastornos lo hacían creer que no llegaría a una edad más avanzada a pesar de lo que tenía, era un pensamiento tan infantil, tan poco favorable e inservible, pero que más da si lo único que sabe es perderse en si mismo, el día no le servía, no lo beneficiaba en nada, tampoco lo necesitaba.
Jeon jungkook era la persona más indescifrable, eso no cambiaria.
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"𝔖𝔦𝔫 𝔰𝔲𝔢ñ𝔬". ༒𝔎𝔬𝔬𝔨𝔪𝔦𝔫
Fanfiction꧁༒𝐄𝐥 𝐢𝐧𝐬𝐨𝐦𝐧𝐢𝐨 𝐬𝐢𝐧 𝐬𝐞𝐫 𝐬𝐮𝐟𝐢𝐜𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐲 𝐥𝐚 𝐭𝐫𝐢𝐬𝐭𝐞𝐳𝐚 𝐥𝐨 𝐢𝐧𝐯𝐚𝐝í𝐚, 𝐚𝐬í 𝐩𝐚𝐬ó 𝟏𝟑 𝐚ñ𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐚𝐬𝐪𝐮𝐞𝐫𝐨𝐬𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚. 𝐏𝐞𝐫𝐨 𝐞𝐥 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐝𝐢ó 𝐚𝐛𝐫𝐢𝐫 𝐩𝐨𝐫𝐭𝐚𝐥𝐞𝐬, 𝐞𝐬 𝐬𝐮 𝐜𝐮𝐥𝐩𝐚...