Volver a Hogwarts luego de todo lo sucedido en el receso invernal con el resto de los Individuos y Draco Malfoy parecía un sueño febril.
En primer lugar porque parecía sentir revivir la misma experiencia del primero de Septiembre. La sobrecarga sensorial era abrumante si, pero saber que sólo debía aguantar hasta el atardecer de aquel mismo día antes de conseguir su dosis era un pensamiento que mantenía su ansiedad al límite.
En segundo lugar, porque todo parecía estar teñido de un matiz de un tinte más cálido. Las paredes no eran tan frías y las personas no eran sólo accesorios secundarios del castillo. Podía comprender cada mirada que era una promesa compartida con un amante. Ya no era necesario ver a dos personas besándose para percibir atracción. Parecía estar en todos lados. Una mirada parecía ser justa y suficiente para crear algo sin la carga de un contacto físico. Las hormonas parecían suplir cada molécula de oxígeno en los pasillos de Hogwarts.
En tercer lugar porque Theodore Nott parecía estar evitándola a toda costa. Nyx sólo llegó un microsegundo tarde para hacer contacto visual con él durante la cena. Supo que él había estado observándola, pero no parecía querer acercarse. Incluso en el tren se había sentado en al menos cinco vagones de distancia de donde se encontraba ella. No podría escapar de Nyx para siempre, ambos eran conscientes de aquello, pero ella tenía asuntos más importantes de los cuales encargarse antes de marcharse esa misma tarde hacia Azkaban.
Encontrar a Fred Weasley en Hogwarts era tan fácil que no hacía falta realmente utilizar el mapa confiscado de Potter.
En el tren lo vió a lo lejos antes de que él ingresara a su propio vagón. Su cabellera y su altura eran un farol que lo hacía fácil de ubicar a kilómetros de distancia. Nyx esperó ver en esos cinco segundos la sonrisa que deseaba encontrarse ansiosamente, sin embargo no fue eso lo que observó. Lucía desgarbado, cansado. No había risas ni humor. Agachó su cabeza al ingresar al vagón sin siquiera inclinar una comisura de sus labios.
Lo observó durante la cena en la mesa de Gryffindor. Parecía no despegarse de sus amigos ni de su familia. Nyx sabía que sólo tenía tiempo hasta quizás unas horas después de cenar para encargarse de lo que quería hacer. Su hermano, el que era tan parecido pero a la vez tan distinto era un imán a su lado. Fue entonces cuando observó que aquel dedicaba una mirada furtiva en su dirección.
No.
No era a ella a quien observaba. Él volvió su mirada hacia su plato, luego levantó su cabeza intentando lucir concentrado en la conversación que se desarrollaba entre sus pares. Sólo pasaron unos segundos antes de que él dirija su mirada nuevamente en su dirección. Pero no era a Nyx a quien observaba, era a Apolo. Interesante.
-Apolo.-Le llamó Nyx hacia el joven de rizos castaños a su lado que apenas había dado bocado de su plato. Él reía abiertamente de una broma que Crabbe había contado. Apolo giró su cabeza hacia ella, aún sonriendo. Sus ojos verdes lucían un brillo particular que sólo resaltaba más las oscuras manchas debajo de sus ojos.
-¿Si?-Le preguntó, totalmente relajado. Nyx se acercó un poco más hacia él, en un intento de disimular lo que le estaba a punto de pedir.
-Necesito que hagas algo.-Le dijo ella, logrando que Apolo arquee una ceja pero aguarde en silencio la orden. Él jamás se hubiese imaginado que Nyx le pediría algo como lo que estaba a punto de decirle.
Nyx subió las escaleras cambiantes, dirigiéndose al pasillo que siempre utilizaban los Weasley para ir hacia la Casa de Gryffindor y esperó contra una de las paredes de piedra. Varios estudiantes de esa Casa pasaron delante suyo y le dirigieron miradas de curiosidad e intriga, algunas de desprecio. La rivalidad era una enfermedad contagiosa que no sólo los de Slytherin padecían orgullosamente.
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Hiraeth
Fanfiction¿Los monstruos nacen así o son creados? Draco Malfoy no ha podido descansar desde que el cuerpo de Cedric Diggory apareció sin vida al final del Torneo de los Tres Magos y su ansiedad sólo se ve aumentada cuando su hogar es invadido por el primer gr...