(¡Último capítulo de esta historia gente! Saltos temporales, y como siempre, canciones que recomienda la escritora.)
La velada fue un éxito, las felicitaciones hacia los recién prometidos no se hicieron esperar, algunas fotografías grupales o de la misma pareja eran ráfagas, demostrando que después de tormentas y pesares, un sol brillante podía posarse sobre sus cabezas.
Ya viendo que la noche caía sobre ellos, se dispusieron a limpiar el lugar, tomando así dos horas de sus vidas para ahorrarles el trabajo a los cuidadores que, con toda la disposición del mundo, les habían dejado el lugar para que pudiesen hacer la celebración. Para así seguir con la junta en la casa de la cumpleañera y su prometido.
Entre limpiar y reír por las ocurrencias, una suave brisa y algunas luciérnagas, hicieron una visita a los comensales, pero aquella extraña brisa, estaba cargada en el aroma de frutillas recién cosechadas.
Haciendo que la piel de la fémina rubia se erizara, recordando al perteneciente de aquel exquisito aroma.
Un tiempo atrás, Hanako estuvo leyendo algunos mangas que Oikawa le regalaba, por haber pensado en ella o como ayuda para sus dibujos u obras, y uno de ellos hablaba sobre demonios y personas que luchaban contra aquellas especies, llamándole la atención una pareja, logrando así enamorarse de ellos.
Y con solo haber recordado aquello, vino a su mente también, lo que Suna le había dicho en aquella carta, comparándola con la escena de esa pareja que luchaba contra demonios.
"La próxima vez te haré feliz, te protegeré, la próxima vez no te dejaré morir" era lo que el chico de ojos heterocromáticos le decía a la chica de cabello trenzado de ojos verdes antes de que ambos perecieran. Después ellos habían reencarnado y se encontraron una vez más, para ser felices juntos.
"Espero vernos en la próxima vida, juro que haré las cosas bien" fue lo escrito en cursiva por el peli marrón, haciendo que ambas oraciones se acoplaran en su cabeza.
Ella no creía muchísimo en la vida después de la muerte, mucho menos en la reencarnación, pero por el particular aroma, sus recuerdos y teorías, sus ideas sobre aquellos temas se verían afectados, haciendo que cambie de opinión con el paso del tiempo.
✨✨✨
(Canción recomendada para escuchar esta parte del capítulo: Hey Look Ma, I Made It – Panic! At the Disco.)
El anillo de oro blanco que descansaba en el dedo anular de la chica de 24 años resplandecía sutilmente en aquel día especial para la rubia, los nervios la corrían de pies a cabeza, los demás estudiantes de distintas especialidades también se encontraban ansiosos, respirando entrecortados, jugando con sus dedos, haciendo muchos rituales para mantenerse serenos.
El director de la universidad se encontraba en el podio, dando un discurso sobre lo orgulloso que estaba de los estudiantes de aquella generación que se encontraban por titularse.
Hanako finalmente tendría su título de Bellas Artes, cumpliendo así uno de sus sueños.
Su celular se veía abarrotado en mensajes de sus amigos y familiares, felicitándola por su mayor logro y prometiendo que la irían a ver, pero cuando había llegado esa mañana a la universidad, veía a otras familias o amigos con sus compañeros o personas que estudiaban ahí.
Pero ninguno de sus amigos estaba ahí.
Y aquello le dejaba un sabor amargo.
ESTÁS LEYENDO
Binding Souls (Suna Rintaro, Osamu Miya X OC)
Fanfic"Con pequeñas cosas, sabrás que es tu alma gemela" Bien, el simple acto de pisar aquel gimnasio, presentar y saludar, desencadenará muchos sucesos tanto buenos como malos, con aquel número diez, aquel bloqueador central. Suna Rintarō. Aunque, todo p...