Nuestra Historia.....*Saint Seiya* ( Saga x Kanon)

Siguiendo pistas (3/3)

Ya han pasado dos semanas desde aquel encuentro tan incómodo con Radamanthys, Saga estuvo pensando en aquella situación y estaba seguro de que ya era el momento más indicado para poder finalizar su plan. Ya no había ningún obstáculo por el cual preocuparse, y sus sentimientos estaban más claros que el agua.

Amaba a Kanon con locura, y no iba a permitir que alguien se lo arrebatase de sus brazos. Así que junto a Camus y Afrodita, decidió ir a aquella cabaña que había alquilado desde hace ya unos meses atrás.

Adornaron la cama haciendo un corazón con pétalos de rosas e hicieron un camino desde la puerta de la habitación hasta la cama con los mismos. Velas aromáticas se podían observar por doquier, en la ventana, en la mesita de noche y unas cuantas mas en el suelo. Al terminar su trabajo decidieron mirar y todo se veía espléndido.

— Todo quedó hermoso, seguro que Kanon quedará aún más enamorado de ti —comentó Afrodita con entusiasmo.

— Gracias chicos, esto no hubiese sido posible sin ustedes, gracias por apoyarme y estar siempre conmigo.

— Para eso estamos los amigos, Saga, para apoyarnos...

Los tres se unieron en un lindo abrazo, Saga se encontraba más que feliz.

El reloj marcaba las 12:30 del medio día, Kanon, Shura, DeathMask y Milo se encontraban en un restaurant disfrutando de una deliciosa comida.

— ¿Ey Shura, que tal vas con Aioros? —cuestionó Milo, mientras tomaba con el cubierto una porción de carne.

— Eh...de hecho tengo una noticia que darles

— ¿A sí? ¿Y cuál es ? —soltó Kanon, quien por fin se digno a mirar a su amigo, puesto que no le había quitado la vista a su teléfono por estar mensajeando con Saga.

— Aioros y yo nos casamos el próximo mes.

— Felicidades a ambos — todos empezaron a felicitar a Shura por su gran compromiso y por la futura boda que se aproximaba.

— Ey DeathMask, y tu que tal vas con Afrodita.

— Pues normal, apenas nos vamos conociendo...

— Pero...¿no te gusta?

DeathMask solo atinó a sonreír y rascarse la nuca, más bien no sabía exactamente con precisión lo que sentía por el peliazul. Era cierto, ya llevaban semanas saliendo y coqueteando pero nunca han hablado de lo que siente el uno por el otro,y es que a DeathMask le daba temor, temor de enamorarse y entregar todo de si y que al final solo sea una ilusión. Sin embargo, no podía negar que esas miradas entre él y Afrodita no eran de otra cosa sino de amor.

Para Death, aceptar que lo que él sentía por aquel joven, era demasiado pronto para proclamarlo "amor de verdad".

Pasaron las horas, y el sol estaba apunto de ocultarse en el horizonte, Kanon llegó a la casa donde se había hospedado junto con Milo y los demás.
Se metió a la ducha y minutos después salió con una toalla amarrada en su cintura, en ese justo momento sonó el timbre y fue a abrir. No había nadie, solo un pequeño sobre yacia en la alfombra de entrada.
La tomó e inspeccionó el exterior, claramente la carta iba dirigida hacia su persona, su nombre estaba impregnado con tinta negra y una caligrafía perfecta.

Cerró la puerta detrás de sí, y rompió aquel sobre para poder sacar la hoja que tenía contenida en su interior, desdobló la hoja y comenzó a leer.

Es tiempo de que nos encontremos, te espero en esta dirección, a las 9:00 pm. Estoy ansioso de verte, mi bello ángel.

Av. Louvre S/N, Col. Bloom Rose

Se dirigió a su habitación para poder vestirse.

(Imaginense algo así ⬇️ , lo siento no soy de esas personas que pueden describir a la perfección la vestimenta (╥﹏╥) )

Miró su reloj, faltaban 5 minutos para la hora acordada así que decidió ir a aquel lugar. Tomó un taxi y le indicó con precisión la dirección a la cual se dirigía.

9:00 pm,  justo a tiempo. Se podía observar las casas y edificios, las luces de los faros  y los autos transitando, hacían que la ciudad se viera tan hermosa. Sin duda alguna París era la ciudad del amor, y eso Kanon ya lo había comprobado con sus propios ojos. No pasó mucho tiempo para que un joven de cabellos verdes al igual que sus ojos se le acercara y le entregará un sobre, Kanon se apresuró a abrir aquella hoja de papel para así poder leer su contenido.

Querido mío, lamento no estar presente, pero no comas ansias, antes de vernos personalmente tienes que cubrir tus ojos con una venda; es para no arruinar la sorpresa. Espero de todo corazón que no te lleves una gran decepción acerca de mi persona.

El chico de cabellos verdes le tendió una venda color azul turquesa, Kanon solo resopló y se colocó el pequeño trapo en sus ojos.

— ¿Como te llamas? —preguntó Kanon una vez que se encontraba con los ojos cubiertos con aquella suave tela.

— Me llamo Jason, yo lo llevaré con la persona que desea verlo.

— ¿ Y... será posible que me digas el nombre de la persona con la cual me voy a encontrar?

— Lo siento señor, no puedo decírselo, es una sorpresa.

— Carajo...

Jason tomó de un brazo a Kanon y ambos empezaron a caminar, así pasaron un rato hasta que por fin se detuvieron.

— Espere aquí señor, iré a avisar de su llegada.

— Está bien.

El total silencio y el frío aire causaron en Kanon un escalofrío, por un momento se le cruzó en la cabeza un sinfín de cosas horribles que podrían pasarle. No sabía quién se encontraba detrás de esas cartas, y temía por lo que pudiera pasar.

Saga fue al encuentro de su hermano, el verlo así con los ojos vendados y completamente a su merced, unas imensas ganas de besarlo y hacerlo suyo en es momento lo invadieron completamente. Más sin embargo tenía que ser fuerte y poner de su parte para no caer en tan bella tentación que se encontraba frente a sus ojos.

Lo tomó del brazo y le hizo caminar hasta llegar a una silla donde Kanon se sentó.
Saga se fue y al poco tiempo llegó Jason, quien le indicó que ya podía quitarse la venda; y así lo hizo, sus ojos apenas se acostumbraban a las luces que estaban frente a él.

Mientras tanto Saga no podía con los nervios y se decía a si mismo.

— Hora de empezar el show...