Capítulo 29- Hogar, Dulce Hogar

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05:00 am

Lan Wangji abrió los ojos y con mucho cuidado de no despertar a Wei Ying salió de la cama, se puso el pijama, tomó las sábanas sucias que se encontraban tiradas en suelo y las llevó a la lavandería que había en el departamento, ayer había sido su último día habitando ese lugar y quería llevarse las sábanas limpias, no quería llegar a lavar.

Wei Ying había pedido día libre, así que Lan Zhan calculó que no se despertaría hasta las nueve junto con los niños, por lo tanto y usando la secadora sí le daría tiempo de hacer una última lavada.

Después de meter todo a la lavadora comenzó con su rutina, lo primero que hacía luego de despertar era tomar agua y meditar para después realizar su rutina de ejercicio; una de las cosas que le asombro cuando volvió a ver a Wei Ying fue que seguía conservando su buen físico, ya que había escuchado de las quejas de su tío que una vez que te casas tiendes a perder la buena figura, después supo que en su agenda de trabajo HuaiSang le tenía apartado de 11 a 13pm para ir al gym.

Al finalizar sus ejercicios se bañó, vistió con su nuevo conjunto deportivo y fue a sentarse en la cama junto a Wei Ying, comenzando a leer "secretos de una madrastra" online porque "el CEO y yo" ya lo había leído, mientras esperaba a que todos despertaran.

Los primeros en despertar fueron los gemelos y lo supo porque comenzó a escuchar ruido en su habitación, así que se levantó y fue a verlos.

-padre buenos días - dijo A-Yuan mientras se cepillaba los dientes

-Papá buenos días, ¿ya nos vamos? - preguntó entusiasmada A-Qing mientras saltaba en la cama

-Buenos días - contestó Lan Wangji caminando hacia A-Qing para cargarla.

-Deja que tu papá se despierte, meteremos las cosas al auto y nos iremos- decía cargando a A-Qing como un saco de papas rumbo al baño.

-comiencen a arreglarse, recuerden que su padre quiere vestirse iguales - terminó de decir, ambos niños asintieron y se marchó del cuarto rumbo al suyo, solo para encontrar la cama vacía.

-¿Lan Zhan eres tu? - gritó una voz desde el baño

-mn- asintió

-¿los gemelos ya se despertaron? - preguntó

-mn- volvió a asentir

-¿y A-Yang? - volvió a preguntar

Como si hubiera sido invocado, se escuchó unos pequeños golpes de la puerta, Lan Wangji abrió solo para encontrarse a Yang ya vestido y arreglado dándole así paso para entrar a la habitación.

-Papá- dijo Yang tocando la puerta del baño, Wei Ying salió bañado, vestido y perfumado, agachandose para cargar al pequeño.

-Buenos días Yang, ¿listo para irnos? - sonrío y el niño asintió.

Solo fue cuestión de minutos meter las pocas cajas que sobraban a la camioneta, Lan Wangji sacó sus sábanas limpias de la secadora y las dobló con mucho cuidado metiéndolas en una maleta, todos enteraron a la camioneta listos para partir.

-díganle adiós a la casa niños- decía Wei Ying poniéndose cómodo en el asiento, a los gemelos parecieron entrarle el sentimiento y queriendo llorar miraron por última vez el gran edificio y le dijeron adiós, Yang quién solo había estado ahí por un día no sintió nada.

El camino fue algo largo, la privada estaba aislada en una montaña pasando un gran lago, pero curiosamente estaba más cerca de la empresa de Wei y de sus conocidos, entraron al lugar y vieron casas con grandes patios, aunque muy separadas, todas ellas con diferentes diseños, estaba los de estilos clásicos, los modernos, rurales etc. Por fin llegaron a la suya, bajandose de la camioneta los niños vieron sorprendidos la hermosa construcción enfrente de ellos y el deportivo negro de su padre que Jiang Cheng había dejado el día anterior .

Niñera ConejitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora