Decisión

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Todo era una jodida mierda. Entre todas las cosas ¿Por que esto? Hubiera preferido romperse las dos piernas en vez de ver el resultado de la prueba entre sus manos. Jala un poco frustrado sus cabellos lisos blancos, maldiciendo entre dientes la maldita respuesta. 

El chillido de la puerta siendo abierta, lo sorprende. Sonando contra el piso los choques de zapatos pesados. Esconde rápidamente la prueba en su abrigo, tomando su celular fingiendo estar viéndolo.

—Hola enano ¿Tan rápido regresaste de tu misión? —pregunta el chico lleno de cicatrices.

—Estuvo fácil —claro no fue a una a ninguna misión, si no a comprar dicha prueba. — ¿Cómo te fue con Shigaraki? —pregunta curioso.

—Te sigue molestando que este con el, Enano de hiele —se le acerca mostrando una sonrisa de burla.

—Vete a la mierda Dabi —se levanta, pero es lanzado de nuevo al sillón. Bufa molesto. —No estoy celoso.

—Claro que si, siempre giras los ojos cuando te pones celoso —se posiciona encima suyo, introduciendo sus traviesas manos dentro de su abrigo. —Maldito enano —comienza a besar su cuello.

Trata de apartarlo, pero la sensación es demasiado placentera que olvida aquel resultado de ojete. Puede sentir como su rostro comienza a arder, puede asegurar que parece un tomate en ese maldito momento. Muerde sus labios levemente tratando de reprimir su jadeo ante los toques ardientes del mayor. 

—Dabi —murmura, hundiendo sus manos dentro la ropa del pelinegro. Subiendo lentamente sus manos ante la ancha espalda, notando la diferencia entre la piel y las quemaduras. No lo admitiría nunca en voz alta, pero amaba eso del otro. 

El azabache comienza a retirar su pesado abrigo azul, dejando a la vista su delgado cuerpo vestido con una camisa negra y unos jeans. En eso ambos escuchan como algo suena dentro de la chaqueta del menor.

—¿Qué traes ahí? —pregunta, normalmente no cargaba con cosas. Entra en pánico.

—Nada — con sus brazos rodea el cuello del ojos turquesa. —Sigamos en lo nuestro. —trata de evadir el tema. 

Ante tal respuesta nota como el mayor frunce el ceño, tomando su abrigo sacando dicha prueba que ocultaba, se muerde el labio. 

—¿Una prueba de embarazo? 

—No es nada —contesta molesta, evitando su mirada. 

—¿Qué carajos se significa?

—¡Que nada! —grita no desea hablar sobre ello, no se siente listo.

El de cicatrices suspira, llevando su mano a su rostro, en ocasiones olvidaba la actitud infantil del menor. —Geten ¿Estas embarazado?

Se queda callado.

—Eso confirma mi pregunta —se levanta del sillón dejando al de cabellos blancos mirando al suelo. 

—No lo entiendo, se supone que soy hombre ¿Por que?

—Lo sabes.

—Nunca lo admitiré —trata de retener sus lagrimas, para no mostrarse vulnerable. 

Geten pertenecía a ese pequeño porcentaje de hombres que podían concebir hijos y lo sabían, simplemente no lo puede aceptar. 

—¿Quieres hablar sobre ello? —sabe que el chico se siente indefenso.

—No quiero tenerlo... No me siento preparado —confiesa.

Se acerca el chico abrazándolo. —Respeto tu decisión.

Se quedaron en ese cómodo silencio, beso la cabeza del otro. —Esta bien no pasa nada.

Si bien ambos eran infantiles, igual eran adultos para tratar decisiones serias y este era el caso. 


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HOLAWIS,

Se que ustedes me conocen por escribir BakuTodo, pero no me resistí para escribir sobre este ship. Realmente no hayo mucho contenido y decidi escribir sobre ellos (hare mención de ellos en mi otros fanfic) 

Asi que espero que le den una oportunidad y sea de su agrado.

Disculpen las faltas ortográficas.

Hasta pronto

Judith Garcia. 

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⏰ Última actualización: Jan 28, 2021 ⏰

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