Capítulo 2. "Un día horroroso"

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¿Cómo describir este día?

Horroroso. Hoy ha sido un día horroroso.

Creo que me he vuelto completamente loca. Si, va a ser eso. El tiempo, el estrés... han provocado esa imagen, no ha ocurrido de verdad Amy, no ha ocurrió de verdad. Te lo has imaginado todo. Si seguro que no ha pasado, seguro que de tanta película y libros te lo has imaginado.

Veréis... hoy he visto una imagen bastante... RARA. E imposible que allá sucedido.

Pero que digo, claro que ha sido real, si lo he vivido con mis propios ojos, aceptalo a sucedido.

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Hoy es viernes. Hace un tiempo feroz, no para de llover. Estoy en mi casa, acabo de salir de el instituto y como siempre estoy aburrida. Me he puesto a comer ya que son las 14:17 y tengo hambre. A las 15:00 tengo clase de piano.

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14:53. Ya es hora de marcharme. Cojo mis partituras, mi móvil, mis llaves y el paraguas y salgo de casa. Acabo de salir de mi portal. ¡Qué asco, no para de llover! Estoy mirando a los lados para ver si encuentro algo interesante, pero nada de nada, no he visto nada aparte de gotas de agua cayendo del cielo misteriosamente. Sigo caminando. La clase está cerca así que no tardé mucho en llegar.

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Empezé tocando "Ghost" y acabé con "Ni una sola palabra" de Paulina Rubio, con una larga lista de canciones en medio. Salí del lugar a las cuatro con los dedos agotados. A las cuatro y media había quedado en el parque con Emma y con las demás, así que debía apresurarme.

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Queda poco para llegar a casa. Estoy pensando en como le irá a Emma, veréis... no me contesta ni las llamadas ni los mensajes. Estoy preocupada. Bueno seguramente se le abrá agotado la batería del móvil, como siempre. No debo preocuparme.

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Sigue lloviendo. Ya he llegado a casa, a las seis tengo baloncesto, si lo sé, ese día estoy bastante ocupada para ser un maldito viernes, aunque también lo adoro por que empieza el fin de semana. Estoy pensando en Emma, otra vez.

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24 llamadas y 48 mensajes. Son las veces que he llamado y escrito a Emma. Ninguna cogída, ninguno contestado. Me estoy volviendo loca. Las cuatro y veinte, cuando la vea le diré que ponga a cargar el móvil pero YA.

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He llegado al parque, no hay rastro de Emma. Solo están unas cuantas amigas más. Esto me está empezando a preocupar de verdad. ¿Dónde narices se abrá metido?

Mientras mis amigas charlaban y charlaban y charlaban y charlaban, yo permanecía muda. Aunque ni se inmutaron de nada ya que soy una maldita acoplada sin Emma, así que aquí no pinto nada. Estoy apunto de irme a mi casa, pero he caído en la cuenta de que sería hacer el gilipollas ya que faltan 15 minutos para entrar.

¡Por dios, es que no se callan nunca! "Que si mi novio es más guapo que el tuyo, que si uso menos maquillaje que tú y estoy mucho más guapa, que si vi el capítulo de Anatomía de Grey y ella es igual que yo, ya que es guapísima y gusta a todos, que si la otra es una imbécil que me cae muy mal, que si deberías hacerte la manicura..." Como no la callen, os juro que le doy una patada y la mando al monte. Maldita Ángela, a ella si que la odio. Siempre está criticando a los demás. Si consigue estar un día sin criticar a alguien, le doy un trofeo del tamaño de mi casa.

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El entrenamiento empezó hace media hora, y tengo un mezcla de disgusto, depresión, ganas de vomitar y hecho de menos a Emma. Ahora estoy más marginada que de costumbre. Lo mejor va a ser pensar que solo me queda una hora para terminar.

¿Qué estoy haciendo ahora? Botar un balón hacía canasta. Y como siempre, no meto.

- ¡Venid! Ahora haremos un partidillo. Tú allí, tu allí, tú al otro... Amy allí y Angela al otro.- Gritaba el entrenador mientras cada una nos poníamos en su sitio para comenzar. Empezó el partido. Yo no sabía ni por donde me daba el aire, estaba la mar de empanada, pero es que tenía unas ganas intensas de acabaar ya. Por desgracia, Angela me defendía. Bueno yo no lo llamaría defender, me estaba MALTRATANDO. Estaba muy pegada a mi, casi no me dejaba moverme, aparte de que me tenía sujeta la camiseta así que no me podía mover. De un minuto para otro yo estaba defendiendo, aunque no se a quién por que Angela me estaba venga a empujar y salía corriendo para que no le pillara. Emma me vino a la cabeza, ¿cómo estaría? ¿le abría pasado algo? No se lo que pasaba pero me estoy preocupando.

De repente y no se como, ni cuando, ni de donde, una pelota me golpeó en toda la cara haciéndome volver al planeta tierra. Miré hacia mis compañeras y ví como se trinchaban de risa. Ví como Angela se acercaba hacia mí.

- Ya lo siento - me dijo poniendo cara triste (falsa) - ha sido sin querer. - con una sonrisa malvada.

- Mira niñata, te diré un par de cosas que llevo deseando decirte desde hace mucho tiempo Barbie humana. - cojí el balón de el suelo y la miré con cara desafiante y cabreada. - eres una creída sin corazón, hipócrita y una falsa que se aprovecha de las personas que les falta un poco de seguridad y defensa propia. Aparte de que piense que eres como una muñeca hinchable que se tira a todo tío que esté bueno. Y no voy a perder tiempo discutiendo contigo ya que no merece la pena, ya que la que va a acabar sola y marginada vas a ser tú. ¡Chao! Gilipollas... - dije sin miedo. Aunque no se como me ha salido todo eso de carrerilla. Se me quedó con cara de "¿¡QUÉ HAS DICHO!?". Yo con rabia le tiré el balón a la cara. - te la debía. - Le sonreí con malicia y salí del gimnasio. ¡Wauu...! Que bien sienta desahogarte. Cojí mis cosas del vestuario y me fuí a mi casa sin despedirme.

Por el camino iba feliz, ya que me sentía orgullosa de mi misma. Por otra parte, ya me podría preparar para los insultos del instituto. Bueno aunque más de los que recibía ya... así que ese era el menor de mis problemas. Decidí llamar a Emma, otra vez. Pero no me cojió. Esto ya era el colmo.

Miraba desesperada hacia la carretera. Al fondo de ella había un coche de la autoescuela blanco de Londres. No se por qué me dió la curiosidad de fijarme más en él. Mi instinto me decía que había algo raro en ese coche. Seguí mirando. Se paró en un cruze donde yo iba a pasar, en ese momento aprobeché para mirar más de cerca. Traumatizada. Esa es la única palabra que podría describir cuando ví aquello.http://www.wattpad.com/mystories?compose=true&id=101687044

En el asiento de atrás había una adolescente de más o menos mi edad atada de brazos y piernas y con la boca tapada con cinta. Luego miré al conductor. Hombre siniestro con capucha negra, apenas pude ver su cara, pero se me quedaron varias imágenes en mi cabeza. Miré otra vez hacia la chica. Me suena un montón su cara.

¡Pero si es Emma! ¡Mi mejor amiga!

Intenté acercarme la puerta para sacarla, pero antes de que pudiera hacer nada el coche aceleró a tope casi atropeyandome.

¡Pero eso es lo de menos! ¡Han secuestrado a mi mejor amiga!

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Holaaaa!!!! :D

Espero que os halla gustado este nuevo capítulo.

No olvideis dejar vuestro voto y decir vuestra opinión sobre el capítulo en los comentarios.

En multimedia os dejo una foto de la secuestrada.

No olvideis corregir mis tontos fallos de ortografía.

Hastaa la proximaa!!! Les quieroo!!

-Naroa_d

De una patada a Nueva YorkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora