Parte 3: La primera noche juntos

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Una vez en el ascensor Deku empezó a ponerse cada vez más rojo, recordando todo lo ocurrido. Le parecía increíble. Todo parecía perfecto mientras estaba con Katsuki, pero ahora que se habían separado algunas preguntas volvieron a su cabeza.

Kacchan parecía tan... ¿atento? ¿cariñoso? Nunca imaginó que el mayor podría llegar a comportarse de esa forma, le resultaba extraño pensarlo, parecían personas distintas. Se sentía nervioso al pensar que iba a pasar la noche con él en su cuarto, aunque le aliviaba pensar que podía hablar este tipo de cosas con él. Esa era la impresión que le daba.

Seguía pensando en ello, como era su costumbre, dándole demasiadas vueltas , ya había pulsado el botón del ascensor para bajar en la planta baja, pero en el último momento decidió pulsar el botón del segundo piso para dirigirse hacia su habitación. Tenía demasiado en qué pensar antes de encontrarse de nuevo con el rubio por la noche... Y un pequeño problema del que ocuparse.

Sin darse cuenta había estado recordando los momentos excitantes que acababa de vivir con el mayor, sintiendo como la sangre de todo su cuerpo se acumulaba en dos lugares: sus mejillas y su miembro. Definitivamente tenía que ir hacia su habitación.

Nada más abrirse la puerta del ascensor salió disparado, rezando para no encontrarse con nadie en el camino. Una vez en su habitación cerró la puerta y el pestillo y suspiró aliviado.

Nunca antes había sentido tanta necesidad por tocarse:

- Mierda, Kacchan... - susurró desabrochándose los pantalones y bajando sus bóxers para descubrir su erección. Lo culpaba por verse en esta situación después del momento que habían compartido.

El de ojos verdes se recostó sobre su cama y empezó a recordar con detalle todo lo que habían hecho para excitarse aún más mientras comenzaba a acariciar su miembro con las puntas de los dedos, de arriba a abajo. Recordaba los juegos con sus lenguas mientras se besaban, recordaba la respiración agitada del mayor, su voz llamándole, sus manos recorriendo su cuerpo... En ese momento se arrepentía profundamente de no haber tenido valor para tocarle a él también. Aunque no se sentía preparado para hacerlo, se moría de ganas de conocer ese cuerpo que le volvía loco, acariciar y tocar cada parte del rubio.

Le excitación llegó a más y el de pelo verde no aguantó, empezó a masturbarse con necesidad, pensando en las cosas que quería hacer y en las que ya habían hecho. Pensaba en cómo se habían besado hace unas horas, pensaba en esos mismos labios rodeando su miembro, en su lengua lamiéndole.

- Kacchan... - suspiraba su nombre. Nunca antes había estado tan excitado, sentía su miembro palpitar entre sus manos. Intentaba imaginarse cómo sería Katsuki sin ropa, cómo sería verle desnudo. No era capaz de imaginar su miembro de una forma concreta, sólo podía imaginarse su tamaño, pensando en el abultamiento que había podido ver hacía unas horas debajo de los pantalones del mayor. 

La forma en la que Kacchan le hablaba, tan sucia y provocativa... Le estaba volviendo loco pensar en todo aquello. Sentía el final cerca mientras seguía masajeando su miembro, manteniendo en su mente la imagen del rubio recostado sobre él, desnudo, gimiendo, tomándolo. Con esta última imagen en la cabeza acabó corriéndose, sintiendo el semen escurrir entre sus manos.

Estaba agotado después de tantas emociones, y algo en su pecho le decía que por la noche iba a tener todavía más emociones. 

El plan inicial era tratar de hablar con sus amigos para recuperar el tiempo que había perdido faltando a las clases pero... Eso podía esperar, prefería centrar su atención en su vida personal, aunque sólo fuese por una vez. Decidió pasar la tarde a solas en su dormitorio hasta que llegase la hora.

BakuDeku / DekuBaku: Buen chico +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora