TENÍAS QUE SER TÚ #1

CAPÍTULO 21

Zack.

Es un lugar lleno de vida, hace tiempo que no estaba en un lugar así. El aire es tan diferente al de la ciudad, las hojas de los árboles, el olor fresco del bosque, me encanta todo esto.

El tiempo es imposible de sentir en este lugar, pasa muy rápido a mi parecer. Han sido unos días increíbles, hice algunas cosas que jamás había hecho, como saltar de una cuerda a un lago o recorrer el bosque de noche o evitar que un grupo de chicos alcoholizados quieran nadar, y la persona con la que menos tiempo he pasado es con mi hermosa Jade, es por eso que he planeado lo de esta noche.

—Vamos, dame tu mano.

—Listo— responde sonriendo—. ¿Qué hacemos aquí arriba?

—Disfrutar de este gran paisaje— extiendo mis brazos frente a nosotros.

—Sabes, el hecho de estar en el borde de este monte sentada en el techo de tu camioneta, me asusta un poco.

Comienzo a reír mientras echo mi cabeza hacia atrás y ella me da un pequeño golpe en el brazo.

—La vista es hermosa, ¿no crees?

No respondo nada, pero realmente lo es, desde esta altura podemos ver las copas de los árboles y un bello cielo estrellado.

—A mí me gusta más la vista que tengo.

Volteo para observarla y al hacerlo nuestras miradas se encuentran y lo único que se me ocurre hacer es sonreír. Ella se acerca más hacia mí y recuesta su cabeza en mi pecho mientras con sus brazos rodea mi cintura, puedo sentir como el corazón se me acelera con cada segundo que pasa. Tal vez llegó el momento que tanto ansiaba, de decirle lo que siempre he querido.

—Es increíble todo esto— se adelanta a decir—. Este campamento ha sido el mejor que hemos tenido y me alegra que lo esté compartiendo contigo.

—Y a mí que me lo permitas— eso se ha escuchado tan estúpido, ¿por qué no puedo responderle con algo mejor? Sin embargo, de un instante a otro todas aquellas dudas que siento desaparecen cuando veo ese brillo en sus ojos que me hace saber que siente lo mismo por mí.

—Desde un principio...— comienzo a decir en voz al parecer muy baja.

—Adivina quien cumple años la próxima semana.

—Mi persona favorita.

—Los chicos están pensando en una fiesta, pero la verdad no estoy segura sí es lo que quiero.

—No es mala idea.

—Lo pensaré.

Pasan diez minutos sin que ninguno de los dos diga algo, estamos en uno de nuestros silencios a los que tanto me he acostumbrado. Y también le estoy dando muchas vueltas a lo que quiero decir, al final decido decírselo de la manera más sincera y como las palabras llegan a mi mente.

—Jade tengo algo que decirte.

No estoy seguro si a todas las personas les pasa que cuando tienen que decir algo importante sienten o notan su voz distinta, porque eso es lo que me está pasando ahora mismo.

—¿Sí? — se levanta y retoma la posición que tenía en un principio.

—Desde hace mucho tiempo he intentado o he querido decirte lo mucho que me encanta estar a tu lado, lo mucho que me encanta que me hagas reír, que un día de tormentas lo hagas un día de sol. Me encanta todo lo que haces y todo lo que tú eres, desde el primer día que te conocí. Eres la mejor parte de mí además de la chica más hermosa que he visto en mi vida.

De repente puedo notar como está a punto de llorar. Le sujeto ambas manos y la miro fijamente a los ojos.

—A lo que quiero llegar con todo esto es que, sí tú me darías el enorme privilegio de seguir llenándote de recuerdos y momentos inolvidables, pero lo más importante, de llamarte ¿mi novia?

Se lleva una de sus manos al rostro, sus lágrimas comienzan a caer y asiente una y otra vez.

—¡Sí! Sí quiero Zack.

Me estrecha en sus brazos y comenzamos a besarnos, ahí estaban sus labios que intentaban decirme que me querían, que me necesitaban cerca, que jamás tendrían suficiente. Sus besos salvajes que me vuelven loco.

—Jade. Te amo con cada parte de lo que soy— dije cuando nos separamos un poco para tomar aire.

—Y yo a ti Zack, te amo— respondió quitando algunos cabellos de mi frente.