Mafia 刀 かたな Katana [Kookmin] ©

Capitulo 20

Como los Cuentos de hadas 

Tratar de olvidar rencores es la decisión más difícil y más si esa decisión la tiene que tomar un joven de tan solo catorce años. Perdonar o seguir teniendo rencor, ser directo o fingir.
Jungkook no sabía qué hacer, desde que habló a solas con Jeon, se sintió muy intimidado sobre cuáles son las decisiones que tomará y sin que en un futuro estas afecten. Por ahora no tomaría una decisión pero se mantendría al margen.
Hoy la casa que aún en su cierto tiempo es una jaula, está adornada con muchas serpentinas y globos de color rosa por qué hoy es el cumpleaños de la pequeña Sun, Jeon se enteró justo está mañana sobre el cumpleaños de la pequeña y rápidamente contrato a un organizador de fiestas para que adornará la caso con todos los gustos favorito de la pequeña. No había espacio que no tuviera rosa o princesas como adornos.

— Señor quedó todo listo, la pequeña me comentó que quería príncipes reales en su fiesta pero nuestro paquete no incluye ese tipo de servicio—

— Está bien!, Ya transferí el dinero a su cuenta—

Los organizadores se fueron de la casa, para así dejarla lista para cuando la pequeña Sun despierte de su siesta. Jeon llamó a una boutique de diseñador para encargar lo último y más especial que la pequeña quiere en su fiesta. Cuando las cosas fueron entregadas Jeon tomó una caja para el y la otra se la llevó a Jimin.

— ¿Cómo estás?—

— Estoy bien...—

— Esto es para ti, úsalo para hoy—

— Gracias—

— Este otro es para Jungkook, dile que es algo para él y que lo usé por su hermana no por mi—

Jeon salió de la habitación para ir a otra para ducharse y vestirse con ese atuendo elegante de fantasía. Cuando terminó bajó al primer piso a ver cómo algunos de sus sicarios permanecían rectos pero con unos elegantes trajes de príncipes, por órdenes de Jeon estos tuvieron que vestirse así.
Más tarde Jimin bajo al primer piso, con su hermoso traje a conjunto con el de Jeon, no eran como tal un traje de príncipes pero fue lo único que pudo Jeon conseguir de un diseñador.

El color blanco del traje relucía totalmente hermoso en conjunto con la piel clara y cabello rubio de Jimin, tal cual príncipe de cuentos de adas, por otro lado el oscuro traje de Jeon reflejaba superioridad en conjunto con su cabello negro y con su dominación.
Cuando la pequeña Sun bajo de la mano de Jungkook, esta se puso muy feliz por qué no solo fue el ver a su hermano de principe si no también a sus dos padres y con la casa llena de muchas decoraciones como si fuera un palacio.

Sin duda alguna al final el joven Jungkook terminó siendo un príncipe verdadero para su hermana, con ese traje tan bien hecho que la figura de Jungkook resaltaba muy bien, si Jungkook estuviera portando este traje delante de muchas jovencitas seguro que estás terminarían enamoradas al segundo de ver la belleza de Jungkook.

— Estoy muy feliz!!, Gracias papi—

Sun corrió al lado de Jeon y lo abrazo con mucho cariño, este solo correspondió el abrazo y se sintió orgulloso de que todo su empeño en esto salió muy bien a tal punto de hacer muy feliz a su hija.

— ¿Tendremos un baile de príncipes?—

— Quieres que hagamos un baile?—

— Si!!!—

Jeon no espero más y ordenó que pusieran una melodía para poder bailar con su hija, está al haber estado en clases de danza ahora se movía muy bien al ritmo de la música y siguiendo a su padre.
Desde retirado Jimin y Jungkook miraron con emoción la escena, su pequeña estaba disfrutando muy bien esto, si tan solo nada malo hubiera pasado ahora serían la familia perfecta.

— Mi hermana está muy feliz—

— Si!, Es tan inocente que hasta yo quisiera ser ella—

— Ser ella?, Para bailar con Jeon?—

— No!, Para vivir felizmente y no darme cuenta de las cosas feas que son en realidad el mundo—

No pudieron seguir con su plática porque la pequeña Sun llegó para jalar a su hermano mayor y que baile con ella.
Jungkook apenado y un poco tenso a la hora de bailar pero como se trata de su hermana tenía que hacer lo que a ella le hace feliz ya que ella ahora es una pequeña que solo transmite amor y felicidad, pero cuando crezca puede que las cosas cambien.

— Está muy feliz sun— Jeon se sentó a un lado de Jimin para mirar a sus dos hijos disfrutar de un baile un poco torpe.

— Gracias por hacerla feliz...—

— Es mi hija y todo lo que quiera se lo daré, también Jungkook le daré todo pero primero debe comportarse—

— Se que eres capaz de todo por ellos, pero el gracias es por el que la trates tan bien aunque no recuerdes nada de nosotros o de ellos—

— Tienes razón, no recuerdo nada, ni siquiera un mínimo recuerdo pero te prometí que haría lo mejor por recordar pero no puedo, a mi mente no llega ningún recuerdo, pero eso no quiere decir que yo no pueda volver a hacer mi historia—

— Historia?—

— Si!, Desde hoy empiezo hacer mi propia historia, una donde trabajaré para hacer feliz a mi familia y recuperar la—

— No creo que sea necesario, yo no iré a ningún lado por qué si lo hago mis hijos sufrirán más—

— Tal vez con la pequeña no tendré mucho trabajo, con Jungkook tal vez batalle mucho pero se que solo es un joven y pronto podremos ser un equipo como padre e hijo, pero la historia que yo quiero empezar es la de enamorarte de nuevo—

Los ojos de Jimin se abrieron en grande ante lo que dijo Jeon. Este contrario tomó la mano de Jimin y lo jalo para bailar con él una hermosa melodía.

— Me permites bailar contigo está linda melodía?— Jeon espero que Jimin aceptara y si lo hizo.

La melodía empezó lenta pero todo se borró alrededor de Jimin, para él ahora solo estaban Jeon y el bailando. Admirando los hermosos ojos negros que tanto ama, esa aura de intimidación y dominación como una bestia. Tal vez al final ellos dos en verdad eran como el famoso cuento de hadas "La bella y la bestia".

— Jimin me permites enamorarte de nuevo?—