PACTO DE SANGRE

Capítulo 5

Thomas

Frente a mí, la pantalla de mi tableta brilla con el informe que acabo de recibir. Francesco Otinetti ha cruzado una línea que nadie nunca se atrevió a cruzar conmigo. Es increíble cómo alguien que alguna vez fue alguien cercano, un socio de ventas, pensó que podría robarnos sin recibir nada como respuesta.

Se llevó los procedimientos de desarrollo de una droga llamada Olv-X, para el borrado de memoria, borra recuerdos específicos de la mente, útil para quienes desean olvidar eventos traumáticos o comprometedores, o en el caso de él, para crear la red de tráfico más grande de mujeres y hombre, dando al mercado personas vírgenes de memorias, con cualidades físicas que prefieran, moldeando a los adultos a al antojo del comprador. Y eso es solamente lo que sé, no me interesa lo que hacen con mis productos, lo que me interesa es mantener mi estatus y nivel en lo más alto.

Respiro profundo. No hay competencia en mi imperio. Nunca la ha habido. Y no la habrá.

Uno de mis hombres aparece en la entrada de mi oficina, Matthew, mi jefe de seguridad. Sus ojos reflejan la misma frialdad que siento en mi interior. Mis soldatos no son solo guardaespaldas; son personas entrenadas y que no dudarán en dar la vida por mi. Y Matthew es el mejor de todos, por eso tiene el puesto que tiene.

— ¿Está todo listo? — pregunto, aunque ya sé la respuesta.

— Si, señor. Su equipo está en posición en los tres puntos estratégicos, y tenemos rastros del objetivo en las afueras del centro de la ciudad. No saldrá de las limitaciones sin que lo sepamos.

Asiento lentamente. Ese imbécil no entiende que no se puede jugar conmigo. La biotecnología no es solamente un mercado; es mi zona, y yo soy el único que puede pisarla.

— Prepara la operación — ordeno.

Él asiente sin dudar. Cuando un imbécil me traiciona, yo mismo lo destruyo y este no será la excepción. He entrenado con los mejores asesinos del planeta, y mi cuerpo es una máquina letal que se ha perfeccionado con años de combate y una disciplina incansable. Siento la frialdad de mi propia calma; en momentos así, es cuando soy más peligroso.

En cuestión de minutos, mi equipo y yo estamos montados en una camioneta para ir al destino, donde nos encontraríamos con los demás. No es que necesite ir; podría resolver esto con un simple comando desde aquí, pero no es solo un asunto de negocios, es personal. Ese puto bastardo sabía que no se traiciona al hombre que controla la vida y la muerte dentro de este territorio, sabía que no se escaparía de mí, sin embargo, lo está intentando.

Mientras la camioneta se mueve, reviso los informes. Mis laboratorios continúan funcionando a máxima capacidad. No importa el golpe que hayamos recibido, Olv-X solo es un engranaje más en mi máquina de poder. El verdadero valor está en mi mente y capacidad de llevar mi éxito a la cumbre.

Llegamos al lugar poco después del mediodía. Mi equipo ya está en el terreno. Mis soldatos se mueven como sombras por la ciudad, cada movimiento está calculado. Matthew me informa que el traidor se encuentra en una residencia abandonada, rodeado de un pequeño grupo de mercenarios para poder llevar a cabo la huida del sujeto con éxito. Piensa que está protegido, piensa que esos hombres armados serán suficientes.

Sonrío ante la ironía. Está vivo, pero no sabe que ya está muerto.

Nos acercamos a la propiedad en una flota de camionetas negras, silenciosas y discretas. Me gusta el silencio, es la calma antes de la tormenta.

Cuando llegamos, doy una señal con la mano, y mis hombres comienzan a moverse. En minutos, han eliminado a los guardias externos sin disparar una sola maldita bala.