Se mi error [Bnior]

Apaga la luz

Lo intente, de verdad. Pero no puedo seguir jugando a este horrible juego que creaste, no puedo ser tan cruel como tú.

Aquellas palabras calaban en mi alma y corazón.

Pude verlo en sus ojos, aquellas chispas que antes fueron de amor y compasión ahora solo eran recelo, en la forma que me aparto de su lado, dejándome atrás, en este oscuro lugar. No podía culparlo, había sido mi culpa, siempre mía. Su voz rota seguía retumbando en mi cabeza, deseaba salir y buscarlo por toda la cuidad, pero mis piernas permanecían inmóviles. Un nudo se formaba en mi garganta, ahogándome.

Cerré los ojos, tratando de controlarme.

Su aroma seguía flotando en el ambiente, impregnada en mi manos, piel y ropa. Intente aferrarme, pero se desvaneció y un nuevo sollozo se escuchó, necesitaba a alguien para conversar o para no sentirme tan solo. Rebuscando en el interior de mi pantalón, tomando el del aparato.

La luz de la pantalla ilumino mi rostro, las lagrimas nublaban mi vista, entre a la aplicación de contactos y su nombre resalto en el primer lugar. Dude por un momento, presione el pequeño teléfono verde que estaba a un lado, apoyándolo contra mi oreja, esperando a escuchar su voz.

- Hola... ¿Jaebeom? - su voz se escucho al otro lado,  podía ver su rostro de preocupación-

Una punzada de culpabilidad atravesó mi pecho.

-Jinyoung- dije, mi voz se escuchaba entrecortada y gangosa- perdí, lo perdí- susurre, un nuevo sollozo nació de mi boca- Youngjae se fue, me dejo atrás-

- ¿Dónde estás? – su era firme o al menos intentaba ser firme- Jaebeom, contéstame 

-En nuestro departamento o... no lo sé, ya no sé qué es este maldito lugar-

-Voy para allá, espérame -

-No, no vengas. Solo quería conversar con un amigo, no quiero que me veas de esta manera. Me siento miserable, solo hablemos-

El sabor a mentira se deslizo por mi boca como miel, una débil voz susurraba "cuelga" "No lo arrastres nuevamente aquí".

-Llevare helado y un par de cervezas. Estaré ahí en media hora- dijo antes de colgar-

Deje caer la mano. Mentía si no me esperaba esta reacción, sabía que él vendría. Jinyoung siempre fue esa clase de persona conmigo, podría estar en cualquier situación y él estaría ahí para ayudarme, al principio, pensé que solo era un buen amigo, pero al pasar el tiempo, me di cuenta de sus verdaderos sentimientos.

Estaba asustado de que él intentara confesarse, pero jamás lo hizo, una parte de mi se sintió aliviada y angustiada. 

Una vez mas, el tiempo paso. 

Un día, llego youngjae a mi vida, no pude evitar caer perdidamente enamorado de él, jinyoung alentó mi amor con una sonrisa deslumbrante. Cuando anunciamos nuestra relación, él mostro la misma sonrisa deslumbrante de siempre y lo abrazo, youngjae y él se había convertido en grandes amigos. Cuando nos mudamos, no importo cuantas veces rechace su ayuda, él empaco junto a nosotros con aquella sonrisa. 

Jinyoung era un buen amigo. Jinyoung en otra vida, hubiera sido un estupendo actor.

El sonido del timbre me arrastro fuera de mis pensamientos, jinyoung había llegado. Levantándome de la cama, arrastrando los pies por la alfombra del pasillo hasta la entrada principal.

Él estaba parado detrás de la puerta con una expresión preocupada y asqueada, quise reír. Me hice aun lado para que entrara, llevaba una bolsa blanca.

Arrugue el rostro cuando el encendió las luces de la sala, aun había rastros de youngjae en la habitación, el dolor en mi pecho se hizo más profundo.

-Te ves terrible- susurro, dejando la bolsa sobre la mesa-

No respondi.

Arrastrándome hacia el amplio sofá gris, derrumbándome.

Jinyoung saco un bote oscuro y un par de botellas de cristal, empujo mis piernas hacia un lado para que el pudiera sentarse. Podía ver en sus ojos oscuros mi dolor reflejado, aparto mi cabello de mi rostro antes de intentar sonreír, extendió una botella.

- ¿Qué haría sin ti? - susurre, tomando la botella-

-Estarías perdido- susurro con una sonrisa triste en su rostro- ¿Qué paso esta vez?

-No lo sé, todo iba tan bien que...- desvié la mirada hacia el techo blanco, el nudo en mi garganta de iba formando una vez más- pensé que todo iba bien-

-Él volverá, siempre lo hace-

-Esta vez no, puede verlo en sus ojos, jinyoung- lagrimas pesadas corrían por mi rostro- ni siquiera tengo fuerzas para averiguar que hice mal-

- ¿Cómo sabes que estas seguro que tu eres el culpable? Quizás...- hizo una pausa- solo...esta vez se acabó su amor, a veces sucede-

-El amor no se acaba de un día para otro- dije, mi voz salió dura y firme- sucedió tan rápido, nada tiene sentido- mi voz se rompió en un sollozo.

No respondió, solo sostuvo mi mano con fuerza.

Bebí el liquido de la botella,  ardiente y agrio, quemaba mi garganta hasta llegar a mi estómago.

Alcohol, alcohol y mas alcohol.

 El tiempo ya no tenia sentido para mi e igual que las palabras que decía jinyoung, se escuchaba lejano como si un túnel nos separaran aunque su rostro estaba a centímetros de distancia, podía ver las pequeñas marcas del sol en su piel pálida.

El mundo dio vueltas alrededor de mi cabeza cuando me levanto del sofá, mis sentimientos se mantenían ocultos y no podía sentir nada mas que alegría. Con un brazos sobre sus hombros, apoye mi cuerpo contra el suyo, olía a noche y helado de chocolate, intente tener mas de ese aroma, la punta de mi nariz rozo su piel y él se tensó, reí. 

Una vaga idea paso por mi mente.

Un cuerpo cálido consolaba el dolor del alma.

"No seas cruel, no con él".

Ambos llegamos a la habitación que seguía oscura, me dejo caer con suavidad en la cama, empujándome hacia el centro de la cama. Se inclino sobre mí, besando mi frente, su boca suave se sintió como fuego contra mi piel.

"Suéltalo"

Reteniendolo, impidiendo que se alejara. Coloque una mano detrás de su nuca, su peli se erizo debajo de mi toqué,acercándo su rostro al mío, en sus ojos podía ver el pánico que se desvaneció rápidamente. Si él no quería esto, podría apartarme y dejarme solo, pero él no lo hizo, se mantuvo ahí.

"Aléjate de él, no puedes tenerlo"

Lo besé, su boca encajaba perfectamente contra la mía.
Cálido

Ambos nos hundimos en un abismo.

"¿Qué demonios estas haciendo? ¿Qué estamos haciendo?"