Antes de que empiecen a leer la historia, les quería comentar que es medio dramática, jajaja, bueno, este fanfic lo escribí hace ufff, ya ni me acuerdo, también lo tengo en Fanfiction, básicamente, es una historia llena de drama, romance y un poco de comedia.
Los primeros capítulos sólo se centran en Naruto y Hinata, no son tan largos, pero a medida que fui avanzando la historia y metiendo más parejas, los capítulos fueron más y más largos, así que llegados a ese punto, los empezaré a dividir en dos partes.
La mayoría de los capítulos lleva la letra de alguna canción, ya sea para inspirar una escena o todo el capítulo, no voy a poner los videos, pero sí les diré qué canción es, por si la quieren escuchar mientras leen.
Sin más, les dejo el prólogo y el primer episodio, espero que los disfruten.
..........
Era una fría tarde de otoño, lo recuerdo como si hubiese sido ayer... aunque ya hayan pasado más de ocho años...aquel tormentoso día... la muerte de mi padre...
Un pequeño niño de cabellos rubios como el sol y ojos azules como el cielo, de aproximadamente diez años corría por una gran mansión. En sus ojos se reflejaba una gran alegría y ganas de vivir mientras sonreía ampliamente. El pequeñín entró al despacho de su padre y se escondió dentro de un enorme estante. Estaba jugando a las escondidas con su madre y estaba seguro de que ese sería el escondite perfecto.
—Naruto, ¡¿dónde estás?! —gritaba su madre, desde quién sabe dónde—. ¡Te encontraré!
—Jeje, mamá jamás me encontrará aquí —susurró el pequeño, divertido.
En ese momento, dos personas entraron al despacho, uno era un rubio muy parecido al pequeño Naruto y el otro era un hombre de cabellos castaños. El pequeño sólo logró distinguir los ojos color perla del hombre que estaba junto a su padre, al parecer, ambos discutían.
—Lo siento, pero las cosas no se quedarán así —dijo el rubio mayor, mirando seriamente al otro hombre—. Yo sé que es algo triste, pero debes pagar por tu error.
—¡Pero no puedes hacerme esto, Minato! —gritó el hombre de ojos perla, furioso, golpeando con sus manos el escritorio del despacho y haciendo que el pequeño Naruto diese un salto desde su escondite.
—¿Por qué ese señor estará discutiendo con papá? —se preguntaba el chiquillo, tratando de oír mejor lo que sucedía al pegar su oreja a la puerta semi abierta del estante.
—Lo siento mucho, Hyûga-san, pero ya está decidido, el fraude a las empresas Konoha fue tu culpa y no puedo dejar que quede impune, irás a la cárcel —dijo Minato con decisión y seriedad en su mirada—. Espero que me perdones —cerró sus ojos azules y se puso de pie, pues permanecía sentado.
—Lo siento, pero no puedo dejarte hacerlo —el hombre de apellido Hyûga sacó lo que parecía ser un revólver del bolsillo interno de su saco, el pequeño Naruto sólo los había visto en las películas de vaqueros, pero nunca en la vida real—. Adiós, Namikaze Minato, fuiste un buen amigo —dicho esto, se oyó el sonido del disparo y, al instante, el pecho del hombre rubio se impregnó de sangre—. Nos veremos en la otra vida.
—H-Hyûga-san... —el rubio alzó una de sus manos mientras la otra la llevaba a su pecho herido, pero al ser la lesión de tanta gravedad, rápidamente su cuerpo comenzó a fallar, su piel se puso pálida y cayó al suelo inconsciente.
—¿Papi? —dijo Naruto, asustado al ver a su papá caer—. ¡Papi! —el pequeño salió de su escondite y el hombre de ojos color perla lo miró asombrado, entonces salió corriendo del lugar mientras Naruto se lanzaba al suelo junto a su padre—. Papi, por favor, despierta —le llamaba, moviendo su cuerpo ya sin ningún aliento de vida en él—. Papi, papi —Naruto comenzaba a desesperarse, con su rostro lleno de lágrimas—. ¡Papá!
*·_·_·*·_·_·*·_·_·*·_·_·*·_·_·*
—¡Papá! —un joven rubio de aproximadamente 18 años, que tenía un par de ojos azules como el cielo o el mar, se levantó bruscamente del mostrador de una tienda de comida rápida. Estaba dormido y aun babeaba un poco, pero su pesadilla había sido horrible, le recordó aquella vez en que su padre... fue cruelmente asesinado.
De pronto, le llegó una caja de leche vacía en la cabeza y el rubio se volteó sobándose.
—¿Qué sucede?
—¡¿Qué sucede?! —repitió un hombre vestido de cocinero, parecía ya algo mayor—. ¡Sucede que otra vez te has quedado dormido en el trabajo, Naruto! ¡¿Cuántas veces tengo que decirte que no lo hagas?!
—¡Ah, perdón! —el joven se levantó de forma escandalosa y luego de arreglarse un poco la ropa, tomó todas las órdenes que le faltaban por entregar y se montó con todas ellas sobre su motocicleta de repartidor—. ¡Enseguida las entrego!
—¡Y no vuelvas hasta que las hayas entregado todas! ¡¿Me oyes?!
—¡S-sí, viejo Ichiraku! —exclamó Naruto, quién salió disparado a cumplir con su trabajo. El restaurante era conocido como Ichiraku ramen, un lugar pequeño, pero bastante famoso en su comunidad por el nivel culinario de sus platillos.
Mi nombre es Naruto Uzumaki, tengo dieciocho años y trabajo en Ichiraku ramen por las tardes. También, estudio en una universidad durante las mañanas. Vivo en Okinawa desde los diez años con mi mamá, desde la muerte de papá, antes de eso vivía en Tokio. En estos momentos estudio administración de empresas, para algún día ser un gran empresario como mi padre, ese es mi sueño. Sé que tal vez parezca una persona alegre y decidida, pero realmente... dentro de mi llevo un gran dolor; la muerte, o más bien el asesinato de mi padre, sé que algún día vengaré su muerte, y ese día... por fin encontraré la felicidad, el día en que te encuentre, Hiashi Hyûga.
ESTÁS LEYENDO
El Error de Amarte
FanfictionCuando Naruto era pequeño, el asesinato de su padre a manos de un Hyûga, marcó su vida para siempre. Años después, se enamoró perdidamente de una chica que le dio un vuelco a todos sus planes, pues ella era la hija del asesino de su padre. Cuando po...