Iwaizumi quiere atención. Atención de su novio. ¡No puede ser que Oikawa esté ahí cómo un pelotudo mirando el celular!
¡Quería mimos carajo! ¡Quería acurrucarse con él! ¡y bersarle el cuello mientras su príncipe se reía avergonzado y le pasaba sus dedos por el pelo! ¡Relajarse por ello y dormir en su pecho! ¿¡Tanto cuesta eso carajo!?
Cuándo la pregunta llegaba a la cabeza del más bajo se detenía a pensar.
¿No estaría exagerando? ¿Tanto por qué esté con su celular? Bueno, también podría mínimo mirarlo, ¿No estaba siendo muy pesado? ¿Oikawa no se sentiría presionado? ¿Siquiera a Oikawa la gusta estar así?
Y así constantemente. Una hora entera que para Iwaizumi fueron tres. Era agotador. Estaba enojado y ansioso. Inclusive salían gotas de sudor por su cabeza que al sentirlas inmediatamente las quitaba.
Tampoco era que él hiciera mucho esfuerzo, sólo miraba al castaño que le sonreía a su teléfono. Quería atención pero no sabía cómo tenerla.
Pese a que el más mimoso de los dos (aunque no lo parezca) era Iwaizumi, Tooru era quién siempre le invitaba a hacerlo, hasta le provocaba burlándose para que lo hiciera.
Hajime veía a su novio y sonrió. Que ganas de comerlo a besos tenía.
Un gusto culposo de Iwaizumi era lo blanca y delicada que era la piel de Tooru. Si apenas le daba un beso, no importa la fuerza, se notaba de lejos. Amaba cuándo en la intimidad tenía vía libre de besar todo su cuerpo. De, literalmente, comerlo. Quería que Oikawa sepa lo querido que era. Quería que sepa lo loco que le ponía.
Se llevó el puño a la camiseta y la sacudió, no era momento para pensar en el cuerpo desnudo de su novio o tendría problemas haya abajo. Y hoy no le apetecía eso. Cómo se dijo antes, él quiere mimos.
Tooru se llevó la mano a la boca con la intención de ahogar una risa ¿Qué mierda estaba viendo?
Tranquilo, no caigas tan bajo, no te molestes por eso, inhala, exhala ¿Por qué mejor no piensas en su risa?
Sí... es mejor.
No hace falta decir que la risa de Oikawa era cómo irte al cielo por unos instantes. Más que un sonido era una melodía dulce proveniente de Tooru.
Bueno, quizás eso sea demasiado, quizás no. Pero algo era seguro; Los momentos en dónde Tooru ríe son y serán los más preciados en la vista y oídos de Hajime.
¿Por qué vista? Si Oikawa ríe, significa que Oikawa está felíz (algo, bueno, bastante obvio no te vas a reir porque se murio tu perro) Y ver al castaño feliz era definitivamente lo más preciado de Iwaizumi.
Suspiró cómo el baboso enamorado que era mientras miraba a su novio sonreirle al teléfono... Si bien deseaba que le toda su atención a él, valía totalmente la pena ver a su príncipe felíz.
---- Iwa-chan me estás mirando por horas... ---- Oikawa hizo que volviera a la realidad. Oh Dios.
----¿Y? Tengo a la persona más hermosa y maravillosa acá a mi lado.
Iwaizumi se inclinó en dirección a Oikawa. Él sonrió de forma pícara.
---- Lo mismo digo pero yo no ando babeando por ti, mi caballero ----. Oikawa se inclinó también y sus labios rozaron.
---- Soy débil ante ti y lo sabes... mi príncipe ----. Iwaizumi sonrió. Le gustaban los apodo que se habían dado.
Oikawa era su resplandeciente príncipe, e Iwaizumi su valiente caballero. Lo peor era que a eso jugaban de pequeños y por eso se llaman así en el futuro.
---- ¿Por qué me mirabas está vez uh? ---- Oikawa apoyó sus manos en los hombros del contrario, con un leve impulso hizo que Hajime cayera y se acostara en el sillón con Oikawa encima suyo ---- ¿Hmm?
---- Y... Empecemos porqué no me das bola
Iwaizumi pasó sus brazos por la espalda de Oikawa y esté acerco su cabeza a la de Hajime. El castaño arqueo una ceja.
---- ¿Cómo qué no te doy bola?
---- Quiero mimos. Quiero besos. Quiero abrazos... y vos ahí con el celular...
Oikawa reprimio la risa ante el comportamiento del morocho, quién apartó la mirada rojo igual a un tómate.
----No podes vivir sin mí... Me siento alagado...
----No sé que decís, ese sos vos, que Iwa-chan esto que Iwa-chan lo otro...
Oikawa sonrió más y beso la frente de su novio. El cuál su corazón empezó a bombear con fuerza.
---- No lo niego, pero no te doy atención una hora y ya te pones loco... Pobrecito me extrañas.
Está vez lo beso en los labios, Iwaizumi correspondió exitado. Deseaba con todas sus fuerzas que Oikawa siguiera y mantuviera un beso profundo. Pero, no fue así. Sin previó aviso, lo dejó ahí. Se apartó.
---- ¿Perdona?
Oikawa soltó una carcajada. ---- ¿Oh quieres más?
Iwaizumi fruncio el seño y se sonrojo más, lo quiere mucho y todo pero cuándo se pone así tenía unas ganas de pegarle.
---- Cómo te gusta verme rogandote eh.
Iwaizumi se acomodó con sus piernas, para así lograr inclinarse y hacer que Oikawa esté sentado sobre él. Asimismo pasó sus manos por debajo de la remera del castaño. Y los fue subiendo mientras le daba caricias.
---- Por favor, necesitó tu atención en mí y sólo en mi por las próximas dos horas... De verdad.
---- Decías rogar de forma literal ¿Paso algo?
Iwaizumi hizo una mueca y negó con la cabeza ante la preocupación del otro.
---- No nada ¿Por qué?
---- Pasa que cómo lo dijiste tan... Desesperado... Y necesitado pensé que había pasado algo y querías que te console o algo asi.
Hajime sonrió y acercó su boca a la de Tooru. Se besaron.
El ritmo del beso siguió. Con los brazos de Iwaizumi moviéndose por la espalda de Oikawa a medida que el otro lo hacía de arriba a abajo, dándole algo de movimiento al beso.
El ritmo siguió hasta que Hajime empezó a levantarse. Ambos estaban sentados. Oikawa aprovechó y se acomodó moviendo las piernas para que estén cruzadas al cuerpo de Iwaizumi. Como el lugar era poco, tomó impulso del apoyabrazos del sillón para así estar más atras y tener las piernas derechas. Mas por el fuerte impacto que tuvieron al chocar con el otro apoyabrazos, el beso fue forzado a terminar.---- ¿Ya tuviste lo que querías? ---- Oikawa sonrió picarona y burlonamente.
Iwaizumi quitó sus manos de los brazos de Oikawa y los pasó por los hombros de esté, repitiendo la escena anterior.
---- Más o menos... Yo quería el tipo de atención dónde nos acurrucabamos...
Iwaizumi estaba satisfecho, sí, pero esos momentos eran preciados para él. Ahora se sentía un pesado codicioso de mierda.
---- Oh podemos hacer eso... Pero no acá...
---- ¿Hmm?
---- ¿Podemos ir arriba... a mi pieza? Tengo un poco de sueño... Podemos acurrucarnos y de paso dormir la siesta.
Oikawa al decirlo sonrió al ver la expresión de su novio. Pero está vez no de manera burlona, sino emocionada y calida. Sintió un leve "Boom" en su pecho.
Iwaizumi tenía los ojos casi brillantes, parecía intentar procesar lo que había dicho, Sonrió con los dientes.
----- Vamos... por favor...
Iwaizumi le dio un fuerte beso en la mejilla a Tooru para acto seguido ponerse de pie y extenderle una mano para ayudarle a pararse.
Aunque para sorpresa de Oikawa, no sólo lo ayudo a levantarse sino que subieron la escalera tomados de la mano. Eso le hizo sonrojar entre todas las cosas.