06 'Hablar no es tan sencillo como parece'

67 10 1
                                    

El calor se colaba por mi piel, era una sensación agradable y abrasadora. Llevaba rato estando en el patio, disfrutando del sol a la vez que fumaba. Mi relación con el cigarro era extraña; podía pasar días— a veces hasta semanas— sin probarlos y de repente un día decidía volver a fumar. Lo hacía— cuando mucho— tres semanas seguidas y volvía al inicio; como un ciclo vicioso.

No me desagradaba que funcionaran las cosas así, tal vez había una temporada en la que gastaba bastante dinero en cigarros, pero me veía recompensada al no fumar por un 'largo tiempo'. 

—¿Fumando otra vez?— la voz de mi hermano me saca de toda mi soledad. Le doy una calada a mi cigarro mientras asiento con la cabeza—. Espero que no lo estés haciendo enfrente del abuelo.

Fruncí el entrecejo confundida. Solté el aire. De todas las cosas por las que Elías podía reclamarme por fumar, que el abuelo me viera no era una de ellas. 

—No creo que le moleste, suele parecer chimenea— me defendí volviendo a posicionar el cigarro entre mis labios para darle otra calada.

Parece que lo que dije no tiene sentido para él, su cara de confusión absoluta lo decía todo. Como si no tuviera sentido lo que decía, sin embargo claro que lo tenía; mi abuelo era fumador compulsivo.

—¿No lo sabes?— preguntó confundido.

Di la última calada a mi cigarro antes de tirarlo y pisarlo, para después recoger la colilla y tirarla en la basura. Lo que menos necesitaba en estos momentos era que mi mamá supiera mi relación con los cigarros.

—¿Qué debería saber?— pregunté mientras soltaba el aire. Cruce los brazos esperando respuestas.

—No lo sabes— concluyó—. No te preocupes, solo recuerda lo que te dije de no fumar enfrente de él— entró a la casa después de decir eso.

Bufé molesta, al parecer todo el mundo— exageraba un poquito— creía que podía irse sin darme explicaciones. Y sí, lo decía por Calum también. No quería que mi mundo girara en torno a él, pero mi mente no podía evitar pensar en él. 

Unas cuantas veces. No planeaba decir si era al día o a la semana.

Habían pasado dos semanas desde la última vez que lo había visto. A veces me mandaba un mensaje preguntándome cómo estaba o que qué estaba haciendo, ni uno solo sobre vernos. No quiero parecer desesperada, pero Calum me había dejado sin respuestas. Sabía que necesitábamos hablar para solucionar esto; no es que haya algo entre él y yo, claro está.

Suspiré intentando dejar ir el pensamiento de Calum con el aire. Mi mundo no podía girar en torno a él... Pero lo hacía. No, no había pensado.

—¡Izzy!— gritó mamá llamándome.

Se escuchaban ruidos de bolsas de algún lugar procedente de la casa. Así que acababa de llegar, justo a tiempo.

—¡Ya voy!— respondí.

Entre y fui hasta donde escuchaba los ruidos: la sala. Ahí estaba ella, parecía estresada y a punto de estallar a gritos. El cabello negro canoso se encontraba peinado en una trenza, cosa que me extraño, no solía peinarse así.

Mordí el interior de mi mejilla antes de carraspear para llamar su atención. Necesitaba un metro de distancia entre ella y yo para que no pudiera percibir el aroma a cigarros. Sus ojos se conectaron con los míos.

—Ayúdame a llevar esto a la cocina, por favor— pidió tomando unas bolsas para llevarlas al lugar que había indicado.

Decidí seguir su ejemplo y tomé la mayor cantidad de bolsas que podía cargar.

Ghost of you ||C.H||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora